El guardia de seguridad Jesús Campos amaneció convertido en héroe después de que las autoridades de Las Vegas reconocieran su participación en la operación para frenar el tiroteo.
"Su valor fue asombroso", declaró el alguacil del condado de Las Vegas, Joe Lombardo, durante una comparecencia ante los medios de comunicación en relación con la masacre, en la que más de 500 personas resultaron heridas.
Campos, que trabaja en la seguridad del hotel Mandalay Bay Resort, desde el que Paddock abrió fuego, fue el primero en ubicar la habitación desde donde se estaban realizando los disparos sobre una multitud de 22 mil personas que en ese momento asistía al festival de música country Route 91 Harvest.
El Sindicato Internacional de Profesionales de Seguridad, Policía y Bomberos de América, que representa a varios guardias de seguridad del hotel reveló la identidad del hombre.
"Sólo queremos asegurarnos de que el señor Campos y todos nuestros oficiales sean reconocidos por lo que hacen todos los días, que es proteger a la gente", expresó su director, Dave Hickey, en declaraciones a The Daily Beast.
El vigilante, que se encontraba desarmado, acudió a la habitación de la planta 32 e, incluso, llegó a llamar a la puerta con la intención de poner fin a los disparos.
La respuesta de Paddock fue disparar desde el otro lado de la pared, hiriendo a Campos en la pierna.
Cuando llegaron las fuerzas del orden, 12 minutos después de que se produjera el primer disparo, Campos les indicó donde se encontraba el sospechoso y les dio las llaves de la habitación.
"En la aproximación inicial, al mirar por las cámaras, se podía ver que varias ráfagas de disparos habían sido disparadas a través de la puerta (...). Esas fueron las ráfagas que (Paddock) disparó con el propósito de abatir al guarda de seguridad", señaló Lombardo.
Al entrar en el cuarto, la Policía encontró a al atacante muerto, por lo que consideran que se suicidó tras cometer la matanza.
"Le dio la llave de la habitación a nuestros agentes y después continuó despejando las habitaciones hasta que le ordenaron buscar asistencia médica", reconoció el alguacil, quien comentó que fue "sorprendente" que Campos no recibiera más impactos de bala ante la cantidad de disparos efectuados por Paddock.
"Tan solo estaba haciendo mi trabajo", señaló Campos en una entrevista telefónica concedida al canal televisivo ABC.
En las últimas horas, las autoridades han comenzado a barajar la posibilidad de que Paddock, que tenía unos 22 kilos de explosivos y cerca de mil 600 balas escondidos en su automóvil, no trabajara solo
"Hay que asumir que, en algún momento, debió contar con ayuda", sentenció Lombardo.
"Es difícil que este individuo fuera capaz de mover esa cantidad de arsenal a una habitación de hotel sin ayuda”.
"Es problemático moverlas sin ayuda, tomando en cuenta la cantidad de cosas que tenía en ambas residencias".
Los investigadores creen ahora que Paddock tenía la intención de sobrevivir a la masacre.
"Él hizo todo lo posible para ver cómo podía escapar", dijo Lombardo, negándose a dar màs detalles.
Pero lo que motivó al pistolero a matar a decenas de desconocidos sigue siendo un misterio.
Una nota fue encontrada en la habitación del Mandalay Bay, pero no fue una nota de suicidio, comentó el sheriff, quien tampoco detalló lo que decía.
Fuente: Agencias