Las autoridades de Houston han hecho énfasis de que no se interrogará a las personas sobre su estatus migratorio en los refugios que se establecieron por las inundaciones.
A pesar de esas garantías, algunas de las personas que están ilegalmente en el país han titubeado al momento de resguardarse en los refugios.
Una de ellas es Maricedalia Osorio, una mexicana madre de siete hijos, todos ciudadanos estadunidenses.
Osorio dijo el miércoles que la noche en que “Harvey” llegó a Houston, la casa rodante de su familia se inundó y el nivel del agua comenzó a subir lentamente.
Llevó a sus hijos a la casa de un amigo, donde permanecieron durante tres días antes de partir el lunes al nuevo refugio que instaló Houston en el NRG Center.
Añadió que planea permanecer en el NRG Center durante los próximos días y que el futuro de su familia es incierto, informa AP.