Con los ahorros que se generen de las medidas de austeridad que adopte la Auditoría Superior del Estado (ASE) para el siguiente año, pretenden crear de un “laboratorio del Calidad”, que obligara a que la obra pública sea de calidad y eso se plasme en la rendición de cuentas y resultados.
Lo anterior lo dio a conocer el Auditor David Villanueva Lomeli, quien aseguró que parte de las responsabilidades de las entidades fiscalizadoras, es proporcionarle a sus gobernados obras de calidad y funcionales que contribuirán a su calidad de vida, por lo que es necesario contar con los mecanismos e instrumentos para medir la calidad de la infraestructura hecha con recursos públicos.
Por lo que dijo que si el presupuesto que le aprueben los diputados es por 154 millones 376 mil 129 pesos o por 140 millones de pesos, para el 2019 se establecerán medidas de austeridad en el gasto corriente, es decir, se ajustaran los gastos en papelería, gasolina, viáticos, etcétera.
“Mi compromiso es que independientemente del presupuesto que se asigne vamos a generar economías, procurando que sea un monto similar al que se había propuesto y lo vamos a reinvertir en un laboratorio de calidad que permita que cuando se hagan auditorías de obra pública se mida también la calidad de los materiales”.
Recalcó que los ajustes para generar ahorros no afectarán los empleos actuales, es decir, no se tocará el rubro del capítulo 1000 que es el correspondiente al personal, por lo que no se afectará a los trabajadores y sus familias.