El problema de la inseguridad y de los vendedores ambulantes que se encuentran en el primer plano del Centro Histórico de Puebla, son los pendientes que deja como herencia el edil Luis Banck Serrato a su sucesora Claudia Rivera Vivanco.

Lo anterior lo declaró el presidente en Puebla de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco), Rafael Herrera Vélez, quien expresó el problema de los vendedores ambulantes no tuvo ninguna mejoría en los últimos años, debido a que no se les dio una opción para dejar las calles del centro.

No se invirtió para favorecer a esas personas que requieren salidas legales a su trabajo, que no están por gusto sino por necesidad. No se invirtió en mercados, están abandonados y representan un peligro para poderse ocupar”, explicó.

Herrera Vélez comentó que este problema es de vital importancia resolverlo, debido a que mucha de la mercancía que se comercializa en los puestos ambulantes es de procedencia ilícita, además de que en los últimos años el número de puestos creció considerablemente.

En el caso de la inseguridad, expresó que desde el año pasado las cifras se mantienen en las mismas con respecto a robos y otros delitos, no obstante continúan siendo muy altas, por lo que es necesario se reconsideren las estrategias de seguridad.

Sostuvo que a partir de que tomen posesión los alcaldes de Puebla y de la zona metropolitana, miembros de la Canaco sostendrán reuniones con ellos con respecto a estos temas y sobre el horario de restricción de bebidas alcohólicas que es un tema que les afecta en sus ventas diarias.