Alberto Flores Morales de 53 años y Ricardo Flores Rodríguez de 21, fueron quemados vivos en Acatlán de Osorio, en Puebla, acusados de robar niños.
Sin embargo, la Fiscalía General del Estado de Puebla confirmó que ambos no habían cometido ningún delito, eran inocentes.
La mamá de Ricardo, quien estudiaba Derecho, vio como lo quemaban en una transmisión de Facebook Live y pidió clemencia para él.
Él es mi hijo no le hagan daño por favor, él no es ningún secuestrador él es de Tianguistengo junto con su tío, ingratos por qué quemaron su camioneta si ellos no son secuestradores soy madre, tiéntense el corazón por favor. Él es mi hijo, no le hagan daño por favor son de Tianguistengo", escribió Charo Rodríguez en la transmisión de Facebook.
Más tarde, compartió en su cuenta de Facebook una de las notas de los hechos y escribió: "Mi niño, me lo mataron".
La Fiscalía de Puebla informó que inició una carpeta de investigación por el delito de homicidio calificado.