La BUAP, a través del Laboratorio Nacional de Supercómputo del Sureste de México (LNS), recibió el galardón “Las TI del futuro” por Fujitsu, compañía global japonesa en el sector de las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC), que reconoció su capacidad de supercómputo y Big Data, así como el diseño y construcción de este espacio en tiempo récord.
Esta distinción tiene como objetivo reconocer a las compañías que están impulsando la innovación en sus organizaciones, a través de la puesta en marcha de innovadores proyectos y soluciones de Co-Creación Digital en 2017.
Durante el Fujitsu World Tour 2018, evento itinerante internacional celebrado por primera vez en Latinoamérica, en la Ciudad de México, se distinguió a tres instituciones: Telefónica Movistar México -empresa española de telecomunicaciones-, en la categoría de Eficiencia en la Gestión de las TICs; la compañía de seguros y servicios financieros GNP, en la categoría de Transformación Digital, y a la BUAP, a través del LNS, en la categoría de Supercómputo y Big Data.
En entrevista, Humberto Salazar Ibargüen, director General de Cómputo y Tecnologías de la Información y Comunicaciones (DCyTIC) de la Institución y quien recibió dicho reconocimiento de manos de Yasushi Takase, Embajador de Japón en México, señaló que este premio reconoce el desarrollo del LNS en tiempo récord, cuatro meses, en comparación con la creación de espacios similares en otros centros de datos y laboratorios, de alrededor de un año.
“Se reconoció que fue una institución que diseñó el proyecto en tiempo récord, proceso que incluyó la compra e instalación de equipo de última generación y construcción del inmueble, además de la realización de un estudio de mercado para conocer las necesidades de los usuarios. Este reconocimiento da muestra de tener equipos de trabajo de última generación”.
UN CENTRO DE ALTO RENDIMIENTO
El LNS es un centro que proporciona servicios de cómputo de alto rendimiento para el desarrollo de la investigación científica, la formación de recursos humanos y la innovación tecnológica. Este laboratorio Conacyt es parte del consorcio integrado por la BUAP, INAOE, Universidad de las Américas Puebla y la Universidad de Chiapas, institución que se integró en 2017. Junto con Abacus del Cinvestav, es uno de los dos centros de cómputo del país con mayor capacidad en equipo y en la atención a usuarios (30 externos a nivel nacional y 60 del consorcio para este 2018).
Empezó a funcionar en enero de 2015 y a partir de entonces ha triplicado su capacidad. Actualmente dispone de una supercomputadora con tecnología Fujitsu, llamada Cuetlaxcoapan, con una capacidad superior a los 200 TeraFlops, la cual es de uso general. Igualmente tiene una segunda computadora, Centepetl, con 135 TeraFlops con tecnología Knights Landing, y una tercera computadora, Cholollan, basada en tecnología GPU (unidad de procesamiento gráfico) para aprendizaje automático (Machine Learning) y profundo (Deep Learning).
Las investigaciones desarrolladas en este centro están agrupadas en ocho áreas, entre estas Física Computacional de la Materia Condensada (sector que representa el 25 por ciento del uso de la supercomputadora), Nanociencia (17 por ciento), Ingeniería de Materiales (15 por ciento), Biofísica (11 por ciento), Física de Altas Energías (10 por ciento), Química (10 por ciento) y Materiales Semiconductores y Orgánicos (10 por ciento).
Humberto Salazar informó que este año el Conacyt autorizó 6 millones de pesos a este laboratorio, monto que se destinará a la compra de equipo orientado al uso de GPU. Los equipos que hacen uso de la tecnología de GPU’s son destinados al procesamiento de imágenes y video, por lo que suelen contar con miles de núcleos de procesamiento sencillos para realizar operaciones simples a velocidades mucho mayores, en comparación con sistemas basados en CPU’s que tienen un número limitado de núcleos de procesamiento, aunque más complejos.
Debido a su simplicidad los núcleos de un GPU no están optimizados para la realización de operaciones complejas como un CPU, pero gracias a sus grandes números y capacidad de paralelización son ideales para las tareas de aprendizaje automático, minería de datos e inteligencia artificial, permitiendo realizarlas hasta cien veces más rápido. Con esta inversión, se ampliaría la oferta de uso, se acelerará la experimentación y se liberaría espacio en la computadora de uso general, expuso el director de la DCyTIC.
Por otra parte, indicó que los principales usuarios del LNS son grupos de investigación de la Institución, entre ellos el del doctor Gregorio Hernández Cocoletzi, del Instituto de Física; del doctor Ernesto Chigo Anota, de la Facultad de Ingeniería Química, y el Grupo de Polímeros, a cargo de la doctora Judith Percino Zacarías, los cuales han tenido una gran productividad científica gracias al respaldo de este espacio universitario.
En cuanto a proyectos de altas energías destacan las colaboraciones internacionales con el Gran Colisionador de Hadrones, a través de los experimentos CMS y ALICE, en Suiza; los observatorios Pierre Auger, en Argentina, y de Rayos Gamma HAWC, cerca del Pico de Orizaba, este último es un proyecto binacional México-Estados Unidos dedicado al estudio de las ráfagas de rayos gamma. También se encuentra la colaboración con el Centro de Excelencia en Física Médica Nuclear (CEFMN), para combatir el cáncer con la terapia de protones.
Es así como el Laboratorio Nacional de Supercómputo del Sureste de México ubica al estado y a la región en un nivel de competitividad internacional, incrementa la competencia en la investigación científica e impacta en la solución de problemas sociales.