A pesar de que a partir del próximo 1 de diciembre, el Salario Mínimo General en México, aumentará de 80.4 a 88.36 pesos, este incremento es insuficiente para que una persona alcance la línea de bienestar, la cual se refiere al valor monetario mínimo para cubrir una canasta alimentaria básica al mes de acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
Lo anterior lo declaró Marcos Gutiérrez Barrón, Profesor Investigador de la Facultad de Economía de la Upaep, quien en conferencia de prensa aseguró que el incremento del salario mínimo no ayudará a la capacidad de los poblanos a adquirir la canasta básica, puesto que esta se encuentra en 94 pesos.
Comentó que lamentablemente el poder adquisitivo de los trabajadores no ha aumentado en los últimos años, debido a que en el 2006 el salario mínimo era de 45.24 pesos y se podrían comprar seis kilos de tortillas y ahora en el 2017 con un salario de 80.40 pesos se pueden comprar esta misma cantidad de tortillas, lo que refleja que a pesar del incremento no hay poder adquisitivo.
Señaló que para que los empleados puedan a tener más poder adquisitivo el salario mínimo debería de ser de 112.58 pesos, puesto que de acuerdo a la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en 2016 México había perdido 40 por ciento de sus ingresos laborales.
Indicó que si bien se considera que este incremento ayudará a la productividad laboral, esto no será del todo cierto, debido a que la mayoría de los trabajadores no verán la diferencia del aumento debido a los precios de la canasta básica y a la inflación correspondiente.
Expresó que es importante generar mejores empleos, puesto que en la entidad se ha alcanzado record en la creación de trabajos, estos son de muy baja remuneración, es decir que solo reciben el salario mínimo, lo cual no ayuda a mejora la calidad de vida de las personas que logran emplearse.