Con emoción y alegría por haber dado su mejor esfuerzo, llegaron a la meta las más de 16 mil personas que participaron en la tradicional Carrera Nocturna Universitaria, a través de la cual, año con año, la BUAP promueve el deporte y la sana convivencia entre su comunidad y la sociedad poblana.
En punto de las 20:00 horas, el rector de la máxima casa de estudios de Puebla dio el banderazo de salida de esta carrera, la cual tuvo un recorrido de 7 kilómetros que comenzó en el Boulevard Valsequillo, frente al Hospital de Pequeñas Especies, en Ciudad Universitaria, y concluyó en el Estadio Olímpico Universitario.
En un ambiente de euforia, con porras y cantos, partieron los contingentes de las diferentes preparatorias, facultades y dependencias de la BUAP, acompañados por la Minerva Marching Band y las muestras de apoyo de familiares y amigos.
Para la edición de este año se premiaron sólo a los universitarios que participaron en la modalidad competitiva y dentro de la rama femenil de la categoría de Estudiantes de Preparatorias BUAP, Diana Karla Morales Rojas, Lluvia Andrea Hernández Reyna y Abigail Bernabé Flores fueron las ganadoras del primer, segundo y tercer lugar, respectivamente; mientras que en la rama varonil, Luis Edmundo Morelos Vidal, Jorge Mena Ximello y José María Papaqui Huesca obtuvieron el primer, segundo y tercer lugar de la competencia.
En la categoría Universitarios, Mary José Solís Cuautla, Carmen Crisóstomo Miguel y Diana Herrera Cruz fueron las ganadoras del primer, segundo y tercer lugar en la rama femenil; asimismo, Iván Romano Hernández obtuvo el primer lugar, seguido de Josué Saúl Monarca Pérez y de Jorge Luis García Sánchez, segundo y tercer lugar, en la rama varonil.
Los premiados recibieron de manos del rector de la BUAP cheques con valor de 10 mil, 8 mil y 6 mil pesos, para los primeros, segundos y terceros lugares de cada categoría.
A lo largo del recorrido, en puntos estratégicos, se establecieron centros de hidratación, ambulancias y señalética para indicar el kilometraje de los competidores.
Es así como llegó a su fin esta fiesta deportiva que ya es toda una tradición entre la comunidad de la BUAP y la población, quienes sin importar la edad o la distancia a recorrer, se animaron a participar en esta experiencia recreativa y portaron con orgullo la playera que los identifica como universitarios.