ESPN informa que Gerard Piqué aseguró este lunes, en el acto de su renovación por el Barcelona hasta junio de 2022, que nunca se planteó cambiar de equipo y que de no haber prolongado su contrato “probablemente” se habría retirado en 2019. “Es Barça o nada. No había otra opción” solventó.
Feliz por esa renovación, Piqué destacó que desde su vuelta al club “siempre hemos ganado títulos, somos competitivos y no tengo la ilusión por ir a ningún otro sitio”, dejando claro que esta época viene marcada “por Leo. La encarna Leo y nosotros le seguimos porque si alguien personaliza esta época es Messi… Hemos coincidido una serie de jugadores, pero él es quien está al frente”.
El central azulgrana, de 31 años, destacó en una rueda de prensa posterior a la firma la “gran suerte que he tenido de vivir toda una vida en mi casa porque hay pocos que puedan decir esto” y aseguró no haberse planteado “nunca” otra opción. “Es un paso natural porque siempre pensé en seguir aquí, con mi familia, mis hijos… Era lo más normal. No tengo ilusión por ir a ningún otro sitio”.
“Nunca podré hablar mal del Barça. Es mi casa y siempre he intentado mantener buena relación con el club” comentó, restando importancia al tema de la capitanía que tan en boga está ahora tras la marcha de Mascherano. “Es cierto que en su momento me dolió no ser capitán, pero ahora soy diferente. Quizá el vestuario prefiere otro tipo de discurso pero sea o no lo sea ayudaré igual que hasta ahora”, afirmó.
“Físicamente estoy bien”, resolvió Piqué para explicar la duración de su nuevo contrato, que le mantendrá en el club hasta los 35 años, dejando claro que lo principal “es tener la motivación por seguir compitiendo”.
Piqué, con Josep María Bartomeu, presidente del Barcelona. Getty Images
Distinto mensaje mandó al ser preguntado por la selección española, repitiendo que la abandonará tras el Mundial de Rusia. “Lo más normal es que deje la selección después del Mundial He vivido grandes cosas y ha sido un orgullo pero es una etapa en mi vida que es momento de cerrarla” significó el central catalán, quien destacó que la selección “me ha dado muchísimo”.
A partir de aquí, centrado solo en el Barcelona, Piqué quiso regatear la polémica con el Espanyol pero acabó entrando en el asunto, mostrando esa capacidad que tiene de no ocultarse en los silencios. “El Espanyol está en Cornellá y eso es una obviedad” se sonrió para reconocer de forma inmediata que si en el futuro llega ser presidente del Barça “no sería un presidente del uso; sería muy atípico”.