Excélsior informa que una entrada fuerte, que en apariencia debió deberse marcado y sancionado con tarjeta, tuvo consecuencias graves en la integridad de Marin Galic, futbolista de 22 años que, por esa entrada, perdió un testículo.
En la Liga de futbol de Bosnia, el elemento del Mostar, desbordó por la banda para iniciar una jugada ofensiva cuando recibió una barrida por detrás. El infractor levantó el pie y conecto la zona blanda del rival, esto durante el torneo de Copa.
Galic se quedó tendido en el césped y más tarde fue traslado a un hospital cercano para ser atendido de urgencia.
Según la prensa local, fue sometido a cirugía donde se le extirpó el testículo.