Excélsior informa que Cristiano Ronaldo vivió un episodio poco común en su vida, luego que agentes armados del Departamento de Aduanas de la Agencia Tributaria llegaron a su yate “aYa London” para realizar una inspección a la embarcación alquilada por el luso.

El sitio Hola.com indica que el portugués regresaba a su barco después de comer con su familia en un restaurante de Formentera.

Al interior del barco, se encontraba Cristiano junto con su novia Georgina Rodríguez, familiares y amigos.

Rápidamente procedieron a cubrir con un toldo el interior del yate en el que descansaba la familia y evitar que se pudiese ver lo que estaba ocurriendo en la embarcación”, indica.

Un hermano del jugador del Real Madrid fue quien se encargó de enseñar toda la documentación que le fue requerida y de realizar todas las gestiones.

INSPECCIÓN ES RUTINARIA

La inspección del yate alquilado por Cristiano Ronaldo en Baleares por parte de tres agentes de la Agencia Tributaria Aduanera forma parte de un control rutinario de embarcaciones y no afecta a los usuarios de las embarcaciones, según fuentes de la Agencia Tributaria.

Este tipo de controles es habitual en las islas Baleares, no van dirigidas ni a Cristiano Ronaldo ni a su entorno, y el objetivo de la inspección está relacionado con el impuesto de matriculaciones de las empresas de chárter.