Debido a que dueños de 140 casonas detectadas con grave deterioro en el Centro Histórico de Puebla no quieren vender o repararlas, el ayuntamiento empezó a enviar notificaciones para que las intervengan o serán embargadas ante el riesgo de afectar a inmuebles continuos.
El titular de la gerencia del Centro Histórico, Sergio Vergara Berdejo, exhortó a los poseedores a que las ofrezcan, pues se han tenido más de 20 derrumbes en inmuebles desocupados, debido a las lluvias.
Sin embargo, dijo, deben aprovechar la oportunidad de empresas de bienes raíces que están interesadas en adquirirlas para algún giro, viviendas, hotel, tienda o restaurante, con el objetivo de darle más vida al “corazón” de la ciudad.
En este tenor, mencionó que hay en lista 50 inversionistas en esas propiedades para rehabilitarlas, pero depende de que los dueños tengan la voluntad de negociar y en otros casos se debe encontrar a las familias que acrediten la posesión, pues algunos inmuebles están “prácticamente” abandonados desde hace una década.
Puntualizó que la Comuna no quiere emprender proceso alguno para tomar posesión de los inmuebles, pero es la única forma de motivar a que éstos sean vendidos o en su caso sean rehabilitados por los peligros que representan los derrumbes con esta temporada de lluvias.
Reconoció que hay dueños identificados de inmuebles en desuso que piden el doble de lo que cuesta su propiedad, pero las inmobiliarias aún cuando sean extranjeras no están dispuestas a pagar cantidades, ya que reactivarlas implica fuertes cantidades de dinero debido al deterioro en que se encuentran.
Tres años sin hacer caso
Mencionó que los notificados tienen tres semanas para tomar una decisión sobre el futuro de sus casonas o, de lo contrario, la autoridad tendrá que actuar, pues han pasado más de tres años de constantes llamados y no han visto respuesta alguna en todo ese tiempo.
Por su parte, el presidente de la Asociación de Inmobiliarios de Puebla, César Bonilla Yunes, consideró que los propietarios están desaprovechando el “boom” por la compra de casonas que inició desde hace dos años, tras ser presentado por el ayuntamiento el Plan Parcial de Centro Histórico para repoblar con 200,000 personas el centro, como había hasta la época de los años 80, luego de que migrarán a la periferia.
Dijo que entre más dejen pasar el tiempo, las desarrolladoras preferirán buscar otras opciones en la zona y, con ello, las propiedades se deprecien más al grado de que terminen en lotes baldíos.
Carolina Hernández Marcial, agente de bienes raíces, dijo que las casonas en desuso oscilan entre los 5 y 7 millones de pesos, lo que considera un buen precio pese a las condiciones en avanzado deterioro y lo que requerirá de inversión para recuperarla parcial o en su totalidad.
Mencionó que otras de las complicaciones a las que se deben enfrentar son los permisos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), ya que aún en el estado ruinoso en que están las propiedades, pide la autoridad que se respete la arquitectura, pese a que casi no haya, lo cual implica un trabajo especial y eso eleva su costo, situación en lo cual no están de acuerdo los compradores.
Fuente: http://eleconomista.com.mx/