LO BUENO
Sólo dos veces el centro de espectáculos, Acrópolis Puebla, ha estado a reventar. La primera vez fue en el último concierto que Juan Gabriel ofreció en Puebla el 12 de agosto (dos semanas antes de su muerte). Y la segunda la noche de este sábado 7 de octubre cuando un desfile de grupos y artistas noventeros lograron el "sold out".
Fey, OV7, JNS, Aleks Syntek, Caló, The Sacados, Pablo Ruiz e Irán Castillo derrocharon la energía de hace 20 años durante las tres horas que duró el maratónico concierto ante, dicen los organizadores, más de 12 mil almas.
Los chavorrucos y algunos Millennials distraídos desempolvaron las rodillas para brincar con las coreografías de "Ponte Atento", "Colegiala", "Pepe", "Media Naranja", "No es obsesión", "Mírame a los ojos", "Azúcar Amargo", "Más de lo que te imaginas", "Bikini amarillo", "Me pongo mis jeans", "Tú necesitas", entre otra treintena más.
Hubo deleite de pupila para todos los gustos. Cambios de vestuario vistosos, con lentejuelas y colores que inyectaron glamour al reencuentro con las pegajosas canciones que sonaron en la radio en la década de 1990.
El despliegue de tecnología, juegos de luces, un escenario con elevadores y audiovisuales, estuvo a cargo de BoBo Producciones, empresa de Ari Borovoy que echó la casa por la ventana, dejando en jaque al show competencia "Únete a la Fiesta" de la poderosa Ocesa.
Horas antes del evento, se anunció un invitado sorpresa. Ernesto D'Alessio apareció a media velada noventera para cantar "El uno para el otro" y "Con el alma en un cajón", a dueto con Irán Castillo.
LO MALO
Aunque el cartel anunciado con tres de anticipación incluía la participación de Erik Rubín y Litzy, ambos no llegaron a la cita. El primero había informado semanas atrás que dejaba el ensamble para iniciar el reencuentro con Timbiriche. La segunda canceló 48 horas antes por un llamado a la grabación de una telenovela, dejando su lugar a Irán Castillo, sin que ello dejará del todo satisfecho al público.
LO FEO
Minutos antes de comenzar el show, se escuchaba "fraude, fraude, fraude", en el último nivel del recinto. Algunos asistentes reclamaban que habían pagado un boleto en la sección de $550 y los estaban acomodando en la de $350. Al parecer hubo un "plan con maña" de la empresa organizadora que, al ver que la venta iba viento en popa, decidió eliminar del mapa la sección con menor costo.
Irán Castillo debutó con el pie izquierdo, pues tropezó y cayó al suelo en su primera aparición en el escenario para acompañar a Darío, el vocalista argentino de The Sacados, en los coros de "Pensando en esa chica".