El monero Eduardo del Río “Rius” murió la madrugada de este martes a los 83 años de edad, según confirmó el gobernador de Morelos, Graco Ramírez, pues sus últimas horas las pasó en Tepoztlán.
El caricaturista era considerado un referente cultural en el país.
A finales del año pasado, el gobierno de la Ciudad de México y el Museo Estanquillo Colecciones Carlos Monsiváis le entregaron el Primer Reconocimiento de Caricatura “Gabriel Vargas”.
El comité de selección integrado por Juan Villoro, Rafael Barajas “El Fisgón”, José “Monero” Hernández, Bernardo Fernández “Bef” y Francisco Haghenbeck, decidió otorgarle al autor de “Los supermachos”, dicho reconocimiento el Museo del Estanquillo de la ciudad.
En aquel momento dijo: “Los homenajes son cuando se muere uno y aquí se están adelantando un poco. No se está acostumbrado a que hablen bien de uno, pero se siente bonito, lisito”.
Acompañado de amigos y colegas, entre ellos, los escritores Elena Poniatowska y Juan Villoro, “Rius” se dijo además sorprendido por el reconocimiento, toda vez que reveló haberlo aceptado “porque lleva el nombre de mi maestro involuntario que fue Gabriel Vargas, quien además fue mi amigo y en mis últimas platicas con él, fue complicado porque no le entendía nada”.
Pidió que “ojalá que siga adelante porque los escritores y literatos tienen un chin.. de premios y los caricaturistas es el primero; espero que el próximo Premio Nobel sea para un caricaturista”.
La escritora Elena Poniatowska describió al homenajeado “como el más entrañable de los caricaturistas y agregó que su vasta obra no solo es la educación política de los mexicanos, sino su educación sentimental”.
Al respecto, Juan Villoro consideró que ya era necesario un premio para la caricatura, pues “todos crecimos leyendo historietas, adiestrándonos en los monos, que ha sido la escuela informal de muchos de nosotros”.
Indicó que en la figura de “Rius” se rinde tributo “a la forma en que nos hemos reído durante décadas del poder y con la que él nos ha ayudado a sobrellevar nuestra realidad”.
El año pasado, a propósito de la declaración del presidente Enrique Peña Nieto, sobre que no se levantaba pensando en “cómo joder a México”, “Rius” no dejó pasar la oportunidad y publicó “¿Cuándo se empezó a xoder Méjico?”, del cual reproducimos un fragmento:
Como parte del reconocimiento que se ha ganado el caricaturista, el mes pasado el gobierno de la Ciudad anunció que circularán 10 millones de boletos del Metro dedicados a Eduardo del Río “Rius”, considerado el “parteaguas de la caricatura en México”.
‘Rius’ comenzó a dibujar en la publicación humorística Ja- Já y de ahí siguió en las revistas Proceso, Siempre! y Sucesos, entre otros. Entre sus publicaciones más famosas está Los Supermachos, la cual le sirvió mucho para acercarse a la sociedad y tras el éxito obtenido, creó Los Agachados, que alcanzó gran fama.
Eduardo del Río nació el 20 de junio de 1934 en Zamora, Michoacán. Tras la muerte de su padre en el mismo año de su nacimiento, su familia se instaló en la Ciudad de México.
Durante siete años se mantuvo interno con los Salesianos, al comenzar sus estudios para sacerdote. No obstante, en 1954 inició su carrera en la revista “Ja-Já” y desde ese momento ha tenido colaboraciones en los diarios y revistas más destacados de México.
Los libros de Rius se han destacado por tener una escritura informal, con un lenguaje sencillo y coloquial, además están ilustrados con sus propias caricaturas y recortes de diversas obras artísticas de otros autores, el estilo del autor es descarado y penetrante.
Se le considera un máximo exponente de la historieta; sus ilustraciones eran realizadas con un ágil trazo y espontáneo, lo que caracteriza a sus obras con frescura y en una línea realista.
Con una gran variedad de publicaciones, sus libros han variado en su contenido, donde Rius ha utilizado diversas temáticas como historias, filosofía, religión, y medicina con propósitos de divulgación.
También ha sido un fuerte crítico del sistema político mexicano, del consumismo, el imperialismo y de la religión en general.
En 1976 recibió su primer premio en el Salón de Lucca con un trofeo del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y 11 años más tarde fue ganador del Premio Nacional de Periodismo de México en caricatura.
Entre sus innumerables obras destacan “Cuba para principiantes” (1966), “La panza es primero” (1972), “ABChé” (1978), “Filosofía para principiantes” (1985), “Publicidad, televisión y otras porquerías” (1989), “El supermercado de las sectas” (1999), “Votas y te vas” (2006), entre otras.
Ha publicado más de 100 libros, además de ser ganador de docenas de premios tanto nacionales como internacionales. Y colaboró en la revista que fundó de crítica sociopolítica “El Chamuco y los hijos del averno”.
Fuente: http://aristeguinoticias.com/