Luis Álvarez, director de Daños y Autos de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), señaló que son muchos los factores que están entorpeciendo el pago de seguros a los afectados por los sismos del pasado mes de septiembre.
Luego de que el presidente de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros, Mario Di Costanzo, llamó al sector asegurador a apresurar la resolución de demandas de damnificados por los sismos, el directivo de AMIS refirió que factores legales, sociales e incluso personales han entorpecido la liquidación de coberturas, sobre todo en la capital.
“Una de las principales causas es que va muy lenta la determinación de cuáles edificios tienen pérdida total, es decir cuáles van a ser demolidos y cuáles reparables, y en los listados que tiene la Ciudad de México hay edificios que les cambian el estatus, ha habido amparos donde se iba a demoler el edificio y un juez dijo que no”, refirió.
Además, mencionó que muchos de los encargados de revisar las condiciones de los inmuebles conocidos como Directores Responsables de Obra (DRO) tampoco están haciendo las evaluaciones correspondientes.
“Hay muchos edificios que aún no cuentan con este dictamen que está a cargo del DRO, y por otro lado también tenemos que hay muchos edificios que se construyeron antes de que existiera la figura de DRO, de hace 40 o 50 años, y no sabemos si el DRO tenga toda la capacidad y conocimientos para decidir sobre los edificios que se construyeron bajo ciertas circunstancias”, comentó .
Asimismo, hay casos donde, aunque ya fue el ajustador, aún falta determinar el avalúo de los contenidos, pues por seguridad se ha impedido el paso. “Hay compañías que incluso están usando “drones” para verificar lo que reclaman los clientes, pues existen demandas donde se mencionan obras de arte”.
Expuso que otra situación está en departamentos que fueron adquiridos entre familiares y donde no se hizo el correcto cambio de propietario por los costos notariales “entonces está en el limbo a quién se le paga la póliza si al asegurado que adquirió la prima o al legítimo dueño”.
“Es un proceso que nos va a llevar de seis o nueve meses hasta año y medio liquidar 70 u 80% de todos los casos y esto es porque hay otros temas que no dependen directamente del seguro”, destacó.
Afirmó que en créditos hipotecarios también existe duda de a quién pagar, pues mientras los bancos piden la liquidación completa si los inmuebles están considerados con daño total, en caso de ser el perjuicio parcial, le indican a las compañías le paguen a los asegurados para que reconstruyan.
Los desacuerdos entre asegurados por el importe de las liquidaciones es otra de las circunstancias que han suspendido la entrega de primas, toda vez que los clientes desconocían el monto del deducible y del coaseguro que se le debe restar a cada cobertura y cuyos factores pueden representar hasta más de 30% del pago de la prima.
Fuente: ELECONOMISTA