Cuando ya vives solo es muy sencillo desequilibrarte financieramente, por eso es esencial que si no lo tienes, hagas un presupuesto y que empieces a recortar gastos. La idea es hacer que inviertas tus recursos de manera más efectiva. Aquí te dejamos algunas sugerencias de por dónde puedes pasar la tijera.
Netflix y otros gastos parecidos
Quizá en casa de tus padres tenías Netflix, Spotify, televisión por cable y plan de telefonía celular plus, además de otras suscripciones más, las cuales si bien seguramente ya te las pagabas tú, lo hacías muy probablemente de manera holgada porque no tenías otros gastos, pero hoy, las cosas ya cambiaron. Pregúntate cuáles son los servicios con los que de verdad te quieres quedar y considera suprimir el resto. A este tipo de gastos se les llama “fantasma”, porque están aparentemente escondidos –porque están cargados en tu tarjeta de crédito– y puedes estarlos pagando sin siquiera usarlos, explica un documento de Seguros Monterrey New York Life.
Uber
Cuando se te hace tarde es muy cómodo llamar un taxi a través de alguna aplicación, que llegue en tres minutos y te resuelva el problema, pero si se te hace costumbre de utilizarlo diario, la cuenta puede elevarse y convertirse en un problema financiero. Es fácil perder el control porque el cargo se hace automático a una tarjeta, pero si tomas en cuenta que lo mínimo que cobra este servicio es poco menos de 40 pesos, sólo es cuestión de multiplicarlo por todas las veces que se te hace tarde en la semana. En general, debes tomar en cuenta qué gastos tienes en transporte para que empieces a recortar. Si tienes auto y cruzas la ciudad, considera compartir el auto con algún compañero de trabajo y que coopere con la gasolina, o incluso utilizar el auto sólo ciertos días para ahorrar en gasolina.
Tu frapuchino diario de Starbucks
A este tipo de gastos se les llama “hormiga” o “fuga”, porque de poquito en poquito van vaciando la cartera. Imagínate que te compras un café diario de esta famosa cafetería estadounidense que cuesta cerca de 60 pesos. Por los cinco días de la semana… ok, pongamos que no cinco, sino tres. Dan 180 pesos a la semana, por las cuatro semanas del año, son 720 pesos al mes. Con esta cantidad muy probablemente puedes pagar tus servicios de internet y hasta los de telefonía celular.
Comer fuera
Ya sea que reduzcas la frecuencia o que lo sustituyas con comida de casa, pero gastar en comer fuera de casa es un gasto que puede lacerar las finanzas. Date el tiempo de prepararte tus alimentos, verás que no es tan aburrido si buscas varias recetas sencillas para que no te aburras. Según una encuesta de la Procuraduría Federal del Consumidor, 75% de las personas que consume alimentos preparados para desayunar o comer fuera de casa lo hace porque no tiene tiempo, así que haz un esfuerzo. Aplicaciones como "Eat this much" pueden ayudarte a planear menús semanales, con lo cual vas a ahorrar porque harás el supermercado con los productos que justo necesitas.
¿De verdad necesitas comprarte tenis de marca cada mes?
No es que no compres ropa o zapatos, pero es que comprarte un par cada mes y luego de una marca tan cara, no te van a llevar a buen puerto al hablar de finanzas. Empieza por reducir estas compras a una al mes, y si no quieres sacrificar que sea de cierta firma reconocida, considera adquirirlo en un outlet, en donde podrás encontrar productos con descuento.
Fuente: http://www.eluniversal.com.mx/