Al comparecer ante la Comisión de Hacienda del Senado, el gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, señaló que será hasta finales de 2018 cuando la inflación se vuelva a ubicar en 3 por ciento, debido a  la burbuja inflacionaria que se ha registrado por el gasolinazo y el cambio en las divisas. Resaltó que la inflación seguirá al alza, del nivel actual cercano al 4 por ciento hasta llegar a que en julio y septiembre ronde el 5.5 por ciento.

Detalló que “se trata de una burbuja, y una vez que termine este año los precios habrán de descender nuevamente hacia niveles más cercanos a su objetivo”. Resaltó que el crecimiento económico del país, aunque ha sido bajo, anualmente es constante, desde 2009 se hilan puros incrementos trimestrales en el PIB, algo que quizá sólo puedan compartir otras cuatro o cinco economías en el mundo.

Insistió en que el consumo interno sigue siendo el principal motor de la economía y que la inversión pública se encuentra en mínimos históricos que pegan al crecimiento de mediano plazo.

El gobernador detalló ante los senadores que la llegada de capitales al país se debe a que se ha ampliado el diferencial de la tasa con Estados Unidos, y el peso ha tenido una apreciación muy significativa , ha sido una de las divisas que más se ha apreciado en el primer trimestre de este año.

Refirió que el sector servicios, agropecuario y el industrial han tenido un buen comportamiento, la construcción va en recuperación, lo mismo que el sector manufacturero, con una dinámica bastante acelerada en los últimos seis meses, y ello se debe a que se han acelerado las exportaciones. Han tenido un desempeño bastante bueno, también señaló que de los 535 mil millones de remanentes que el tuvo el Banxico destinó 335 mil al gobierno federal y 215 mil millones los utilizó el banco para incrementar las reservas.

Después de la intervención de Carstens se desarrollaba una sesión de preguntas y respuestas.

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