Las políticas proteccionistas y la cargada del magnate republicano contra México, próximo a convertirse en el presidente número 45 de los Estados Unidos, y las coyunturas del mercado interno provocaron que el Banco Mundial rebajara en casi un punto porcentual su perspectiva de crecimiento para la economía mexicana en el año que recién empieza.

En el informe “Perspectivas económicas mundiales: Escasa inversión en tiempos de incertidumbre”, el BM ajustó hasta un 1.8% sus expectativas para la economía de México en 2017, debido a la incertidumbre política y económica que soplan desde Washington.

Las acciones del magnate ya han provocado que el peso mexicano entre en llamas. En lo que va de enero del 2017, la moneda mexicana se ha depreciado 5.26 por ciento. En este día el dólar rebasó los 22 pesos por unidad en las ventanillas de los bancos capitalinos.

El Banco Mundial, sin embargo, prevé que el control de la inflación, el buen manejo de las remesas, que recientemente tocaron un nuevo pico histórico, así como el fortalecimiento del empleo permitirán que la economía del país se mantenga en terreno positivo durante todo el año.

“Luego de años de un crecimiento global decepcionante, estamos entusiasmados por mejores prospectos en el horizonte”, dijo en un comunicado el Banco Mundial. Y sobre México, añadió: “se considera que en este país el consumo privado será más sólido, gracias a la baja inflación, el bajo nivel de desempleo, el aumento de los salarios reales y el gran caudal de remesas”.

De que las cosas resulten para el bien de México en 2017, la economía del país, la segunda de América Latina por tamaño, crecería 2.5 en 2018 y 2.8% para el año 2019, el primer año de la próxima administración federal.

El Banco Mundial también dijo que el crecimiento global se acelerará este año, debido a una recuperación de los precios de las materias primas que aliviará las presiones sobre los mercados emergentes como Brasil y Rusia.

Se espera que el crecimiento en las economías desarrolladas se eleve a un 1.8% desde el 1.6% del 2016, mientras que en los mercados emergentes la expansión se aceleraría a un 4.2% en este 2017 desde el 3.4% anterior.

Fuente: El Economista