Reuters informa que el Gobierno mexicano detuvo este martes una subasta de cinco ingenios azucareros, los últimos en manos del Estado, luego de que un juez concedió un recurso a los antiguos propietarios para suspender temporalmente su venta.

La decisión del tribunal no cancela la venta de los ingenios, que en conjunto producen el 10% del azúcar en México, sólo la retrasará unos días, dijo Javier Dorantes, director corporativo de comercialización de la estatal Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE), oficina encargada de llevar a cabo la licitación.

"Los jueces están resolviendo con información que recibieron de los quejosos, no han valorado la información del Gobierno federal y eso va a suceder en los próximos días", dijo Dorantes.

"Lo que estamos haciendo es detener el proceso para efectos de que podamos atender el tema y en breve reanudar el proceso en donde nos quedamos", añadió.

Con la subasta de los cinco ingenios, el Gobierno busca terminar un largo proceso de reprivatización de 27 instalaciones que expropió en 2001 por problemas financieros.

En una subasta en junio, el SAE adjudicó cuatro fábricas en 3,282 millones de pesos. Las cinco que iban a ser subastadas este martes y por las que el Gobierno pide 3,920 millones de pesos no fueron vendidas en esa ocasión.

Tanto las fábricas vendidas en junio como las que iban a ser subastadas este martes pertenecían a Grupo Caze, que desde hace años ha buscado infructuosamente frenar su reprivatización y recuperarlas.

De acuerdo a lo planeado, los ingenios -cuatro en el estado de Veracruz, con costas en el Golfo de México, y uno en el central San Luis Potosí- se ofrecerán de manera individual y sólo dos irán juntos a la venta en un paquete.