“No podía creer lo que estaba pasando”, narró a Excélsior Natalia Arroyo, sobreviviente mexicana al ataque efectuado por terroristas en el Teatro Bataclan, a su padre el empresario moreliano Juan Pablo Arroyo.
A través de Facebook, el director de Grupo Caasa, quien describió este suceso como el más desesperante de su vida, compartió lo que su hija vivió cuando escuchaba la música del grupo Eagles of Death Metal.
Ubicada en un palco del recinto, Natalia recuerda que apenas habían tocado cuatro canciones cuando los sonidos de balazos comenzaron y las bocinas explotaban. La gente no sabía lo que pasaba, creyeron solo eran problemas de audio.
“Cuando vimos a los integrantes de la banda salir corriendo del escenario al ver lo que pasaba en el ruedo nos asustamos y vimos muchos muertos abajo y seguían los disparos”, comentó.
“El palco de arriba se vació”, detalló. Pecho tierra, ella y los demás sobrevivientes se arrastraron a un cuarto que daba hacia el techo, sin escaleras, solo había “un hoyo”. Ahí cerraron la puerta, dejaron a cuatro personas detrás porque uno de los atacantes se dirigía hacia ellos.
En el cuarto, detrás de la puerta, un hombre tomó un extintor para golpear al victimario en caso de que entrara, no lo hizo, solo movía la manija, “no entendimos por qué no disparó a la puerta”.
Con la tensión y moviéndose cuerpo a tierra, Natalia decidió que era “absurdo” continuar cargando su bolsa, así que la dejó sin olvidar su cartera, se arrastró lo más rápido que pudo y corrió hacia la puerta.
Le rogué a las personas que me subieran cuando dejé de ayudar yo a empujar gente hacia arriba y ya que me ayudaron a subir me aventaron y me pegué en la cabeza. Me ayudó un chico a pararme y me dijo que corriera por todo el techo hasta la ventana de la casa del vecino. Entré al cuarto agradeciendo a las personas, era como una sala grande con varias ventanas y éramos 50 personas”, explica.?
Fuente: http://www.excelsior.com.mx/nacional/2015/11/16/1057645