Apro informa que el arzobispo de Morelia, Alberto Suárez Inda, anticipó que en su visita a México –prevista para los primeros meses de 2016– el Papa Francisco tocará temas como la reconciliación y la paz, la atención a las víctimas del crimen y el futuro de los jóvenes, entre otros.
Durante una conferencia en la sala de prensa del Vaticano, en la que habló de su participación en el Sínodo de los Obispos, sostuvo que el Papa llevará un mensaje esperanzador, y no descartó que aborde temas como el narcotráfico y la migración en el país.
La visita papal será no sólo “un consuelo y un bálsamo”, sino también “un acicate”, un impulso a los católicos para que se comprometan, apuntó Suárez Inda.
Añadió: “La visita del Papa nos da una inmensa alegría, falta que el santo padre nos señale las fechas y los lugares que va a visitar, pero sin duda que los temas que le interesan son los asuntos de actualidad que vive nuestra gente”.
El arzobispo destacó que seguramente Jorge Bergogio “podrá visitar alguna cárcel y estará con los jóvenes pensando en cómo se requiere hoy mirar al futuro con gran esperanza”.
Señaló que en México 88% de los habitantes se proclaman católicos, “pero como decía Juan Pablo II, el 100% son guadalupanos, entonces el Papa estará en el santuario de Nuestra Señora de Guadalupe, esto es lo que tenemos ya como un dato seguro dentro del programa”, precisó.
Suárez Inda se dijo “impactado” por la experiencia del Sínodo, una asamblea episcopal convocada por el papa Francisco para debatir los desafíos de la familia en el contexto actual, que inició el pasado domingo 4 y concluirá el domingo 25.
Destacó que en la asamblea, en la que participan alrededor de 270 “padres sinodales” (entre ellos siete mexicanos), se ha podido tener “la visión del mundo entero” y “la realidad de las familias”.
“Los pastores de las comunidades locales nos permiten asomarnos a la realidad, tocar la realidad en su situación dolorosa muchas veces, pero también las familias que son un verdadero ejemplo y nos animan a seguir trabajando”, añadió.
Reconoció que en México, en su diócesis, existen muchas familias rotas que viven el dolor de la división por la gran cantidad de migrantes en Estados Unidos, lo cual crea problemas por la distancia y las leyes “muy duras” que impiden a las familias reintegrarse.
Las familias ahí, subrayó, padecen otros problemas como las consecuencias del crimen organizado y el impacto de la globalización, que llega a través de internet y la televisión, generando desafíos para la propia identidad cultural.
Sobre la visita papal a México, Guzmán Carriquiry Lecour, secretario general de la Pontificia Comisión para América Latina, dijo en entrevista que de confirmarse que Bergoglio hable ante el Senado, significará un hecho de indudable relevancia.
“Así que tomen los susurros con pinzas. Para mí sería un hecho inédito impresionante de que el Papa fuera invitado a hablar ante el Parlamento mexicano, porque todos conocemos la historia de México”, comentó.