ESPN informa que varias semanas después de la imagen que dio la vuelta al mundo, Santiago Garcés, fotógrafo mexicano, convivió con Lionel Andrés Messi, el hombre al que retrató en uno de sus máximos momentos de gloria tras conseguir una espectacular remontada de 6-1 sobre el París Saint Germain.
Gracias a ese instante, el trabajador del conjunto blaugrana logró lo impensado: Regaló un autógrafo al astro rosarino en un intercambio de firmas, plasmadas sobre dos cuadros que les hermanan desde aquel 8 de marzo, cuando los dirigidos por Luis Enrique consiguieron el boleto a los Cuartos de Final de Champions League.
"No sabía que iban a generar esta expectativa otra vez, pero bueno, fue una sesión organizada por el club y me reuní yo con Leo, hicimos intercambio de fotos. Le dimos dos fotografías, una me la firmó él y la otra se la firmé yo a él, cada uno se quedó con una copia", relató Garcés en entrevista para ESPN Digital.
Este tipo de reuniones entre personal de la institución y las grandes figuras no suelen ser constantes, aún menos para el encargado de material de marketing, quien lo mismo retrata al equipo de balonmano que a la 'Pulga', máximo referente del conjunto catalán.
"Fue una ocasión especial... la foto, supopongo que el club pensó que la fotografía lo amerita y lo organizaron así, no sé si a petición de Leo o del club, pero se organizó y se entregó la foto", agregó al respecto, para luego aclarar que su contacto se limitó a un par de palabras y sonrisas.
"Lo más importante fue haber hecho la fotografía, el momento que se vivió en la foto; el reunirme con Leo fue una consecuencia lógica y normal, yo creo, porque ambos estábamos un poco emocionados con la foto y que fue normal, era una situación normal que el club organizó", declaró desde España.
Aunque sabe que a su carrera le quedan varios años, Santiago no está seguro de poder superar este gran logro; la repercusión global que tuvo 'la fotografía', como suele llamarla, no ha cambiado su vida, pero sí le ha puesto frente a los reflectores y de cara el camiseta número 10.
"Fue cuando acabaron el entrenamiento, tuvimos un momento para la entrega de la fotografía, se hizo foto con mis niños y fue un momento corto, pero sencillo y bonito", concluyó Garcés, para luego describir a Leo como una persona normal, 'nada especial'.