TDN dio a conocer que duelo de deprimidos en el Estadio Cuauhtémoc. Mientras Puebla cesó al técnico Pablo Marini en la semana por malos resultados, el plantel de Chiapas ha lidiado con problemas extra cancha que perjudican su accionar.
Aún con estas adversidades, con tres fechas por disputar la bondad del torneo mexicano todavía no elimina a alguno de los dos.
Puebla
La Franja despidió a Pablo Marini por una racha de siete juegos sin triunfo, incluidas derrotas en los tres últimos. No gana desde el pasado 21 de febrero.
Fernando Martínez, anterior responsable del equipo Sub 20, será el estratega interino hasta el final del torneo. Por supuesto, su intención será tratar de alcanzar la Liguilla. Con 15 puntos están cinco detrás del octavo pasajero. Así que matemáticamente hay opciones.
Pero también Martínez tiene otra misión. Sumar para la próxima temporada porque la lucha por no descender será nuevamente será el pan de cada día. Los poblanos se han acostumbrado a ese ritmo de vida en los últimos seis años.
Y cuando parecía que escapaban un poco de su cruz, la mala racha los ha vuelto a poner en la mira. Este torneo se han salvado y para el próximo Morelia partirá con mucha desventaja. Pero Puebla estará nuevamente en el pelotón de los que tendrán que cuidarse.
Chiapas
No hay equipo con más incertidumbre en México que Jaguares. El plantel ha decidido no entrenar en varias oportunidades por la deuda salarial que tienen con ellos sus directivos.
Eso sí, en el campo los futbolistas se han entregado. Aunque no lo demuestren los seis partidos sin victoria que acumulan, cinco de ellos derrota. Ni tampoco el solitario gol que han anotado en los últimos 467 minutos de Liga.
Ricardo La Volpe no podrá contar con el suspendido Félix Araujo para su visita a la Angelópolis.
Los números indican que Chiapas aún tiene opciones de Liguilla, aunque la cordura dice que debe pensar ya en el próximo semestre.
Expectativas
Puebla y Chiapas viven rachas muy negativas. La Franja tiene un poco más de aspiraciones en el actual torneo, pero parece que la depresión hará presa de ambos en el Estadio Cuauhtémoc.