Excélsior informa que este fin de semana se enfrentan dos equipos de tradición en el futbol mexicano. Unas Chivas que han mostrado una clara mejoría tras la llegada de Matías Almeyda reciben en el Omnilife a un conjunto del Puebla que ha encontrado en Pablo Marini al estratega adecuado para salir de la comprometida situación del cociente en la que se encuentra.
Ambos equipos viven realidades similares. Con base a malas decisiones por parte de Jorge Vergara, propietario del Rebaño, tomando en cuenta el constante periplo de entrenadores y dirigentes que han tardado más en llegar que en salir de Verde Valle.
Entre ellos, podemos citar a técnicos como Efraín Flores, John Van Schip, Johan Cruyff, Ricardo La Volpe, Carlos Bustos, José Manuel y Néstor de la torre, sin olvidar los constantes relevos de José Luis Real en el primer equipo.
Todos ellos tienen un común denominador, la poca paciencia que han recibido de parte de la cúpula de los tapatíos.
Con “El Pelado”, la confianza ha ido a la alza, el funcionamiento y la actitud de sus dirigidos es diametralmente opuesta a lo que ocurría con el ”Chepo” de la Torre, donde faltaba la garra que el argentino ha sabido impregnarles.
Desde el Apertura 2014, Chivas se involucró en una dinámica de malos resultados que lo hundió hasta el sitio 15 de la tabla porcentual. Hoy, más allá de seguir en esa lucha, se nota un cambio notable en todas las aristas.
En la Angelópolis, lamentablemente se han acostumbrado a ver al cuadro de “la Franja” ha padecer y a verse como un equipo comparsa más que protagonista.
De la época importante con Emilio Maurer al frente a la actual, la incongruencia ha sido algo característico. Pasando por Francisco Bernat, Ricardo Henaine, Jesús López Chargoy y ahora con su hijo, Carlos López a cargo, el Puebla ha tenido más malas que buenas. José Luis Sánchez Sola “ el Chelis” ha sido el único que los ha puesto en el mapa de la trascendencia y Pablo Marini poco a poco brinda estabilidad a un proyecto que en un inicio despertaba muchas dudas.
Del Apertura 2012 a la fecha, el Puebla no piensa en otra cosa más que en salvarse, de no perder la categoría. Seis técnicos intentaron sacar del atolladero a una institución que apenas respira y a la cual un triunfo le sabe a gloria.
Para el partido de la jornada 13 del Apertura 2015, Puebla llega fortalecido, luego del empate ante los Rayados del Monterrey como visitante en partido pendiente de la fecha dos, mientras que Chivas pretende olvidar el trago amargo que significó la caída en Ciudad Universitaria ante Pumas.
Atrás quedaron las épocas en las que los duelos entre estos dos equipos, eran los artífices de grandes partidos. Uno de ellos está catalogado como el más importante, la final del 89 – 90 dejó huella no solo entre los seguidores de estos dos escudos, sino también en los amantes al balompié.