El Financiero reporta que las nuevas tecnologías digitales traen consigo una mayor movilidad, que ha provocado que sea cada vez más sencillo vivir una vida “nómada”, cambiando de ciudad cada que sea necesario o deseable.
Diversos servicios digitales pueden ayudarnos a encontrar estancia temporal en diversos destinos.
Una de estas opciones, que funciona principalmente en Latinoamérica es Dada Room, plataforma que une a personas con cuartos libres con aquellas que buscan dónde vivir. Esta alternativa presenta algunas dificultades, pues el tiempo de estancia y el pago de servicios dependen del arrendatario, por lo que es necesario revisar a detalle qué se ofrece en el precio de la renta y cuál el tiempo mínimo de estancia.
Flat-Club es un servicio mundial de oferta de cuartos. Algunas constan de un cuarto dentro de un departamento, mientras que otras son en-suite, es decir, cuartos con baño propio y cocineta compartida, más parecidos a un hotel. Éstas son comunes para estudiantes en Europa.
En este sitio la mayoría de los oferentes aceptan estancias a partir de un día, con precios que se ajustan según el periodo elegido. Todas las cotizaciones incluyen los servicios.
Otra opción es Roam, que ofrece habitaciones en-suite con espacios comunes de trabajo que se comparten con otros profesionales con el mismo estilo de vida.
Cuentan con espacios en Miami, Bali e Indonesia. Este mes se inaugurará en Madrid y próximamente en Londres y Buenos Aires.
El plan de la empresa es contar con ocho ubicaciones el próximo año. El costo del servicio es de 500 dólares por semana, sin importar la ubicación y ofrece todos los servicios, incluyendo Internet inalámbrico.
Bruno Haid, fundador de Roam dijo que el objetivo de la distribución de espacios comunes es canalizar mejor el presupuesto de una construcción “para tener una cocina comunal con todos los aditamentos en vez de 50 cocinetas chafas”.
TIPS
Elige la oferta en el país destino, el tipo de servicio que buscas (baño privado o compartido, cocineta, servicio de alimentos) y el tiempo que planeas vivir en ese lugar.
Revisa los períodos mínimos del contrato, así como los servicios incluidos en tu cuota y aquellos que pueden cobrarse aparte, por ejemplo la limpieza.
Si estás tratando directamente con un usuario, es recomendable evitar los depósitos en la medida de lo posible: busca pagar tu estancia a tu llegada para evitar fraudes.