UnoCero informa que sabemos que la tecnología se encuentra en todas partes, pero cuando de salud y bienestar se trata, es cuando más sorprende. El cáncer de mama es una de las principales causas de muerte en mujeres, aunque también se han dado casos en hombres.
Ante esta lamentable situación, un joven de 18 años desarrolló un brasier inteligente que estará capacitado para detectar si una mujer tiene cáncer de mama en sus etapas iniciales para poder ser tratado a tiempo. El brasier de color rosa, integra aproximadamente 200 biosensores que ayudarán a detectar el cáncer de mama mediante la temperatura de los senos.
El brasier toma por nombre EVA y cuenta con un algoritmo basado en inteligencia artificial para poder llevar a cabo un mejor control de la salud en las glándulas mamarias. Los sensores táctiles de EVA evaluarán la superficie del seno y detectarán cambios abruptos en la temperatura, lo que podría traducirse como inicios de cáncer de mama.
El aumento de temperatura se debe a que los tumores requieren mayor sangre para su crecimiento, por eso el exceso de vascularización genera mayor flujo de temperatura en la zona. Tomando eso en cuenta, el brasier podrá identificar inmediatamente posibles riesgos antes de que sea demasiado tarde.
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) pondrá a prueba dicho brasier para evitar que el cáncer de mama continúe desarrollando consecuencias trágicas para quienes lo padecen. Julián Ríos, estudiante del Tecnológico de Monterrey, es el joven que está impulsando este nuevo proyecto a través de su startup llamada Higia Technologies.
El joven Ríos acaba de firmar un contrato con Mikel Arriola, Director General del IMSS, para comenzar a implementar una fase de pruebas a nivel nacional. Higia Technologies estará utilizando los centros públicos en los estados del país para hacer valoraciones clínicas a miles de mujeres.
La idea de Julián Ríos surgió a partir de que su madre vivió una mala experiencia con el diagnóstico de la enfermedad, perdiendo ambos senos y a punto de perder la vida. Preocupado por la salud de su madre, Ríos desarrolló un parche lleno de sensores que se coloca en el brasier para así enviar información del padecimiento a un smartphone con el que se vincula vía Bluetooth. Aspectos como el color, textura y temperatura, saldrán a relucir para tener una mayor noción de la salud en los senos.
El parche tardará 60 minutos en realizar el diagnóstico y está pensado para ser utilizado semanalmente. Los resultados de la prueba a través de EVA, serán evaluadas, según los algoritmos del sistema y podrán ser enviados al oncólogo de confianza para recibir asesorías.