Hola dio a conocer que ya la conocemos, ya sabemos quién es la mujer más bella del universo. En una final llena de emoción y nervios, Iris Mittenaere, representante de Francia, fue coronada como la nueva Miss Universo, convirtiéndose así en la mujer más bella del mundo.
Coge el relevo de la filipina Pia Wurtzbach, que le entregó la corona a la atónita concursante que no pudo contener su alegría. Con ella en el escenario, se quedaron las dos finalistas Raquel Pélissier, Miss Haití, y Andrea Tovar, Miss Colombia, en segundo y tercer puesto, respectivamente. “No me lo creo, ha sido una gran sorpresa” declaró la recién coronada belleza, que aseguró que no esperaba siquiera llegar a la ronda final. Comentó además que se siente muy orgullosa de llevar de nuevo el título a Europa, donde no recaía desde 1990 cuando ganó la noruega Mona Grudt.
A sus 23 años de edad y 1,73 centímetros de altura, Iris Mittenaere es estudiante de medicina dental y también hace trabajos como modelo. Le encantan los deportes extremos, viajar y la cocina. Se define a sí misma como una persona divertida, espontánea y que se preocupa por los demás. Su objetivo durante este año de reinado es viajar por todo el mundo volcándose en acciones humanitarias para proporcionar educación a todos los niños y también a las mujeres. Esta es la primera vez que Francia se pone la banda desde 1953 cuando ganó Christiane Martel.
En el grupo de las 12 finalistas -por primera vez se ha tenido en cuenta el voto de los internautas-, quedaron las candidatas de Kenia, Indonesia, Estados Unidos, México, Perú, Panamá, Colombia, Filipinas, Canadá, Brasil, Haití y Finlandia. Desfile en traje de baño, vestido de noche, traje típico... las aspirantes tienen que pasar varias pruebas y pasear sobre el escenario con distintos modelos, demostrando su elegancia, simpatía y soltura en la pasarela. La española Noelia Freire vivió momentos únicos durante esta competición, tal y como ella misma señaló en sus redes, aunque se quedó fuera de la primera criba de la competición. Para las participantes han sido días de mucho trabajo y nervios, una aventura inolvidable que para Iris Mittenaere, la nueva Miss Universo, no ha hecho más que empezar.