Infobae dio a conocer que Irina Shayk quiso probar qué se siente ser rubia y, por eso, se atrevió a un radical cambio de imagen. La novia del actor Bradley Cooper estrenó su nuevo look este fin de semana y lo mostró en las redes sociales.
"¿Quién dice que no puedo ser rubia?", escribió la cotizada modelo en su cuenta de Instagram junto a una foto donde reveló su nuevo color de pelo.