El Mundo dio a conocer que Severus Snape, el profesor de Harry Potter que en un principio era un villano pero después no estaba tan mal, es el personaje por el que medio mundo suspirará hoy al conocer la noticia de la muerte del actor Alan Rickman.
Es normal: la serie y elpersonaje fueron un éxito. Pero que alguien recuerde que Rickman se mereció un largo y bonito obituario. Hoy se ha dado a conocer la muerte del intérprete británico. Tenía 69 años.
Los más refinados se acordarán de Sentido y sensibilidad. Rickman interpretaba allí al coronel Brandon, el amante secreto de Kate Winslet. Ya quisiéramos muchos. Por entonces, nuestro hombre aún era cuarentón y llevaba una apostura de caballero romántico, casi greñudo pero aún apuesto y formal.
Su cara parecía hecha para ese tipo de personajes. Unos años antes, en la versión teatral de Las amistades peligrosas asomó la cabecita en el papel de un amanerado Valmont que gobernaba aquella corte lujuriosa.
A su manera, estaba bien en el papel de sátiro.Hay más hitos que despiertan en la memoria de los cinéfilos al nombrar a Rickman. En Love actually hacía de marido de Emma Thompson.
Si somos amables, diremos que su crisis de la mediana edas era muy notable. No lo hacía nada mal en ese estereotipo de actor inglés en película americana. Y hay otras muescas no del todo desdeñables: La jungla de cristal, Robin Hood, príncipe de los ladrones, Dogma... un buen puñado de grandes producciones estadounidenses que contaron con Rickman en papeles de secundarios destacados.
Con ese currículo y con ese aspecto, casi que se puede adivinar la biografía de Rickman, que fue uno de esos actores ingleses que cargaban con toda naturalidad con un equipaje impresionante.
Estudió arte, se pasó a los escenarios, pasó por la Royal Academy of Dramatic Art, hizo de Shakespeare y del teatro isabelino su universidad... Esas cosas se acababan notando en la cara, en la expresión de Rickman ante una cámara. Hay una bonita historia sobre Alan Rickman más que merece la pena ser contada. Cuando tenía 20 años, se emparejó con Rima Horton, que entonces tenía 19 años y que después se convirtió en economista y trabajó en el Partido Laborista.
Estuvieron juntos durante 50 años antes de casarse en 2012. En alguna entrevista, Rickman dijo de su mujer que era "una mujer extraordinariamente paciente. Quizá una candidata a la santidad". Un abrazo para ella.