De acuerdo con la revista TV Notas, la obsesión de Vanessa por lucir guapa y delgada ha sobrepasado límites. “Come mucho y luego lo vomita”, asegura e insiste en que es talla 3 pero quiere ser 0.
Incluso, señala que su salida del programa no fue por arritmia y taquicardia como Huppenkothen aseguró en su cuenta de Twitter sino porque la producción decidió sacarla debido a que padece bulimia.
Curiosamente la información concuerda con la actitud que Vanessa demostró durante su paso por el reality show “Bailando por un sueño”, donde sufría mucho porque se sentía gorda y no porque es pésima bailarina.