Leal, disciplinado y sobre todo eficiente. Así ha sido Roberto Moya Clemente como secretario de Finanzas y Administración, un secretario de lujo que ha pecado de discreto pero que la pasada semana, al comparecer ante los diputados con motivo de la glosa del cuarto informe del gobernador Rafael Moreno Valle, dio cátedra y dejó muy en claro por qué ha sido fundamental para que el grupo en el poder pueda seguir construyendo un futuro prometedor para Puebla y sus próximas generaciones.
A pesar de la crisis económica que caracteriza al entorno mundial desde al menos mediados de 2014 y el oscuro escenario que plantean a corto plazo el precio internacional del petróleo, el tipo de cambio del dólar frente a otras divisas y la reducción de 2 mil 677 millones de pesos para Puebla por las medidas de austeridad y disciplina presupuestaria tomadas por el gobierno federal, Roberto Moya ha sabido mantener el barco a flote, lo que se dice fácil pero no es.
Y no sólo eso: ha reducido la deuda pública del estado en 18.2% en términos reales, ha mantenido estable el gasto corriente y, en especial, no ha dejado que los problemas políticos, sociales, electorales o económicos, tanto locales como nacionales, afecten la inversión pública y los programas sociales, su prioridad en todos estos años de administrar los dineros del Estado.
Véanse si no los 12 principales logros del secretario de Finanzas del gobierno morenovallista a lo largo de 2014:
1. Se duplicó la recaudación por concepto de ingresos propios, que tuvo la administración anterior en su último año de gestión, pasando de 3 mil 725 millones de pesos en 2010 a 7 mil 438 millones de pesos en 2014.
2. Puebla obtuvo un monto histórico de ingresos totales por 86 mil 757 millones de pesos, lo que significó un aumento del 59.2 por ciento respecto a 2010.
3. En el 2010, la Unidad de Coordinación con Entidades Federativas y el Servicio de Administración Tributaria, ubicaban a Puebla en el quinto lugar a nivel nacional, en efectividad y productividad en la defensa del interés fiscal. Para 2014, el gobierno logró que la entidad ascendiera al segundo lugar nacional.
4. En lo referente al Gasto Público, al implementar el Presupuesto basado en Resultados (PbR), como una herramienta necesaria para la asignación eficiente de recursos, el gobierno del estado obtuvo el quinto lugar a nivel nacional, avanzando 8 lugares respecto a 2010.
5. En el Índice de Información Presupuestal Estatal que publica el Instituto Mexicano para la Competitividad A.C. (IMCO), la entidad logró el primer lugar a nivel nacional, avanzando 18 posiciones respecto a 2010, al pasar del lugar 19 al primero que actualmente ocupamos.
6. En la evaluación realizada por la consultoría Aregional, Puebla mejoró 20 posiciones en el Índice de Transparencia y Disponibilidad de la Información Fiscal, respecto a 2010, ubicándola como la segunda mejor en el país, al pasar del lugar 22 al 2.
7. Durante 2014, se destinó el 67.4 por ciento del Gasto Programable a las políticas de Desarrollo Social, con el fin de favorecer el acceso a mejores niveles de bienestar en beneficio de la población, a través de servicios de educación, salud, vivienda y cultura.
8. No obstante que la presente administración cuenta con diversas autorizaciones otorgadas por parte del Poder Legislativo, para la contratación de financiamientos; la política ha sido invertir para el crecimiento y desarrollo del estado, sin pedir un solo peso prestado.
9. La deuda que atañe al gobierno del estado, conformada por la Deuda Directa y la Contingente o Avalada, se ha reducido en 18.2 por ciento en términos reales, al pasar de 8 mil 367.1 millones de pesos, en enero de 2011, a 7 mil 921.2 millones de pesos, en diciembre de 2014. Lo que se traduce en una reducción de casi 446 millones de pesos. La deuda de los estados del país, en su conjunto, alcanzó en septiembre de 2014 su mayor nivel en los últimos 23 años desde que inició su registro. Sin embargo en esta administración, Puebla en lugar de incrementar su deuda la ha disminuido, lo cual le ha permitido ubicarse como una de las entidades con menor endeudamiento.
10. Como resultado de todas las acciones anteriores, las calificadoras Fitch Ratings y Moody´s, ubicaron a la entidad, como el quinto estado mejor evaluado en términos de su solidez financiera. Lo que se traduce en un bajo riesgo en el incumplimiento de sus obligaciones financieras como Estado, así como una capacidad superior para pagar las obligaciones de deuda de corto plazo.
11. En lo relativo a los avances en materia de desarrollo y eficiencia administrativa, el gobierno del estado fue galardonado por la revista InformationWeek con el premio “Las Más Innovadoras del Sector Público”, por el proyecto “Gobierno Eficiente e Inteligente”, reconocimiento ganado por el modelo innovador del Centro Integral de Servicios (CIS), en el uso e implementación de las Tecnologías de la Información y Comunicación.
12. En 2014, el reporte Doing Business, del Banco Mundial, que mide la facilidad para hacer negocios, reconoció a Puebla, como la entidad, que más avanzó en el país, al mejorar 14 posiciones.
Sí: le guste a quien le guste, le pese a quien le pese, Roberto Moya Clemente ha sido un secretario de Finanzas y Administración de lujo, un auténtico “mago”, pero sobre todo un aliado clave –el brazo financiero, vamos- del gobernador Rafael Moreno Valle, con quien se ha mantenido en la misma posición a lo largo de lo que va del sexenio.
Se le va a extrañar en el gobierno ahora que en marzo se vaya como diputado federal plurinominal, con nuevos retos, nuevas tareas y como parte de un proyecto nacional, tal vez encabezando una de las más importantes Comisiones del ramo financiero o económico de San Lázaro.
Pero su legado, esfuerzo y compromiso con Puebla ahí quedarán, para siempre, aunque los intereses, las envidias y la mezquindad del entorno le nieguen el reconocimiento público que sin duda se merece.
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A quien también le fue muy bien en su comparecencia ante la Cámara de Diputados es el secretario de Competitividad, Trabajo y Desarrollo Económico (Secotrade), Tony Gali López, quien este 27 de febrero cumple ya un año de haber asumido la dependencia.
Gran gestor y mejor publirrelacionista, Gali López llegó a su presentación con la tarea hecha.
Informó que Puebla ha logrado por fin recuperar la confianza de inversionistas nacionales y extranjeros –al 2014 la Inversión Extranjera Directa alcanzó los 2 mil 761 millones de dólares, monto 121% superior al registrado en todo el pasado sexenio- y detonar nuevos polos de desarrollo, como la edificación del Centro Especializado de Recursos Humanos para el sector automotriz, con una inversión de 681 millones de pesos, para 17 laboratorios especializados, más de 300 equipos y un área de robótica, todo en una superficie de 19.5 hectáreas.
El titular de la Secotrade reportó la puesta en operación de dos centros de entrenamiento tecnológico manufacturero, certificados por FESTO, empresa líder mundial en automatización de procesos, y el inicio, junto con la iniciativa privada –con la que sostiene estupenda relación-, de la construcción de dos parques industriales en San José Chiapa y Nopalucan para 80 empresas proveedoras de autopartes, que generarán 13 mil nuevos puestos de trabajo.
Por si fuera poco, dijo que como resultado de éstas y otras inversiones, y de acuerdo con datos del IMSS, se crearon 74 mil 442 puestos de trabajo entre 2011 y 2014, 59% más que los registrados durante toda la administración anterior.
Y adicionalmente, en coordinación con el Servicio Nacional del Empleo, se realizaron 30 mil 395 acciones de apoyo a los desempleados y subempleados en la entidad, con una inversión de 73 millones de pesos.
En resumen: Prueba superada para quien, dicen, le depara un futuro promisorio a corto plazo dentro del equipo morenovallista, al que pertenece por derecho y méritos propios.