Tan poquita cosa los consideran, que el Comité Ejecutivo Nacional del PRI –al estilo salinista- no sólo no ve ni oye sus lloriqueos, sino que ni siquiera les respeta su sagrado derecho al pataleo.
Ignorados y minimizados, los rebeldes del tricolor –Doger, Armenta, Mier, Giorgana, etcétera- van a tener que esperar, y de paso tragar pinole, porque está claro que el CEN sencillamente no quiere perder el tiempo con sus lamentos por la alianza con el partido de la profesora Elba Esther Gordillo, quien en la mesa, y sin despeinarse, les quitó una senaduría y dos diputaciones federales.
Ayer por la tarde fue cancelada la gira de trabajo que llevaría a cabo hoy por Puebla el secretario de Organización, Ricardo Aguilar Castillo, para escuchar las quejas.
La trascendente visita de tan importante personaje “se realizará en fecha próxima”, según se informó de manera oficial, por lo que sí, efectivamente, van a tener que sentarse a esperar.
La verdad que el CEN del PRI tiene otras prioridades, más allá de detenerse en revueltas que, desde ahora se sabe, no modificarán un ápice los términos de la coalición firmada con el PANAL y el PVEM.
El priísmo nacional en pleno se encuentra ocupado en los actos preparativos del próximo domingo para llevar a cabo la unción de su Nuevo Emperador.
Y es que el domingo 27 es el registro de Enrique Peña Nieto, y, ¡claro!, del sparring que –a la falta de Don Beltrone- le van a poner de parapeto para legitimarlo como candidato a la Presidencia.
Por lo que en el CEN francamente no va a andar perdiendo el tiempo con dos o tres que en Puebla se inconformen con los buenos negocios entre el ex gobernador mexiquense, la Gordillo y Carlos Salinas de Gortari.
Es decir, entre los distinguidos integrantes de la verdadera, la única, la auténtica Famiglia Revolucionaria:
¿O me equivoco?
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Por cierto, que a quien tampoco le hacen –ni le harán caso- es al dirigente estatal del PRI, Juan Carlos Lastiri.
Y es que la reunión “urgente” y “de alto nivel” que promovía para analizar con los líderes de los insurrectos las inconformidades surgidas tras el establecimiento de la coalición, también se pospuso.
Ahora se realizará –si bien les va- hasta el próximo lunes 28 de noviembre y en las oficinas del CEN en la ciudad de México.
Es decir, en los terrenos de Humberto Moreira, a quien de plano –según cuentan- no le importa lo que digan o piensen o le escriban los priístas de Puebla.
De hecho, si en su berrinche se van y se arrojan a los brazos de Andrés López Obrador o del PAN, hasta un favor le harán al partido.
Y es que entre menos burros, más olotes.
O como diría el clásico:
Más ayuda el que no estorba.
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¿Quién dijo que la política es el arte de tragar sapos sin hacer gestos?
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Por cierto:
Carlos Salinas de Gortari estará en la Universidad de las Américas Puebla el próximo martes 29, en punto de las 11:00 horas.
Presentará su libro “¿Qué hacer?” dentro del ciclo de conferencias Celebridades UDLAP Otoño.
Y ya se anuncian como agotadas tooodas las localidades.
¿Por qué será?