Arturo Luna Silva
El martes de esta semana hubo una visitante distinguida en Casa Puebla.
¿Su nombre?
María de las Heras.
La directora general de Demotecnia estuvo, con su equipo de trabajo, afinando los últimos detalles sobre la metodología de la encuesta estatal que empezará a levantar en los próximos días, con el fin de saber quién de los aspirantes a gobernar Puebla está mejor posicionado en conocimiento e intención de voto.
Además obviamente del gobernador Mario Marín Torres, en la reunión –previa a la que este día sostendrán Javier López Zavala, Enrique Doger Guerrero, Jorge Estefan Chidiac, Jesús Morales Flores, Alberto Amador Leal y Víctor Hugo Islas- estuvieron presentes Alejandro Armenta y Paloma Guillén, presidente estatal y delegada del CEN del PRI, respectivamente.
Trascendió que el método y la muestra que aplicará la respetada experta en estudios de opinión pública, dejará satisfechos a todos los interesados.
Que no habrá, pues, mano negra.
(Una acotación: no se vale tirarse al piso, o desgarrarse las vestiduras, por la presencia de María de las Heras en Casa Puebla, la residencia oficial del titular del Ejecutivo.
Es hasta normal.
¿O algún iluso todavía cree que la sucesión se está manejando y operando en el edificio del PRI de la Diagonal?).
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Por cierto: ayer, voces tan interesadas como desinformadas corrieron la versión de que Enrique Doger Guerrero ya negoció con el gobernador Mario Marín para levantarle la mano a Javier López Zavala y que por eso, al cónclave de este día en el PRI, el ex alcalde y ex rector sólo llegará de puro trámite, es decir, a hacer la mejor actuación de su vida.
Según dicha versión, el “gran acuerdo” consistiría en entregarle varias posiciones políticas a él y a su grupo (la SEP a Ignacio Mier Velasco y tres diputaciones locales: una para Enrique Chávez Estudillo (a) “El “Kío”, otra para José Ángel Pérez García y una más para Fredy Aco), así como una fuerte, muy fuerte cantidad de dinero para el propio Enrique Doger.
Debo decirle que la especie es totalmente falsa y que sus promotores sólo buscan verle la cara a más de un ingenuo.
No se deje sorprender por estos amantes del “sospechosismo”.
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Este viernes se verá una señal más de por dónde se resolverá el proceso interno del PRI.
Y es que Javier López Zavala será agasajado con una comida por 500 empresarios, entre ellos algunos de los más importantes del estado.
¿Pues qué saben que usted y yo no?
La cita es en el Fraccionamiento Lomas de Angelópolis.
Seguramente usted que me lee, y que no quiere quedarse fuera de la jugada el próximo sexenio, ya compró su boleto de 200 pesotes para comer chiles en nogada y, sobre todo, para tomarse la foto con ¿el candidato?
Si no, corra porque se agotan.
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¿Va en serio lo de la alianza PAN-PRD?
¿Quién será el genio de tan maravillosa idea?
De ser cierto, ¿ya se habrán dado cuenta los panistas del pésimo negocio que van a hacer con los del pe-erre-de?
¿Ya vieron el raquítico, vergonzoso 3% de los votos que le otorgan las encuestas más serias a una institución prostituida, que no sólo no existe en el estado, sino que sus más importantes “líderes” son esquiroles u operan para priístas como Mario Marín, Mario Montero Serrano y Javier López Zavala?
¿Qué le pasa a ese tal Víctor Hugo Círigo Vásquez?
¿Creerá que en Puebla no sabemos cómo se las gastan los renglones torcidos de Jesús Ortega?
¿Acaso fuma de la verde?
¿Se hace buey?
¿O nos quiere hacer bueyes?
¿Qué el muchacho Juan Carlos Mondragón no se ha enterado que el PRD es el partido con mayor porcentaje de rechazo en el estado y que con amigos como ésos para qué quieren enemigos los panistas?
¿Qué le van a dar al PRD en caso de que la famosa “alianza” fructificara y el candidato ganara?
¿La Secretaría de Gobernación para el “Loquito” Zamora y la SEP para Arturo “El Sapo” Loyola?
¡Qué Dios nos agarre confesados!
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Nada más son 14 los priístas que tendrán que bajarse (o ser bajados) de la contienda interna del PRI para la alcaldía de San Andrés Cholula, con el fin de que Luis Alberto Arriaga sea el candidato por ese importante municipio conurbado.
Tengo la lista completa.
¿Quiere saber sus nombres?
Ahí le van:
Iván Mange Zamora.
José Gabriel Tello Rojas.
Miguel Ángel Quechol Gómez.
Lizzette Gallegos Lozano.
Narciso Mendoza Rojas.
Aldo Octavio Tecpanécatl Tolama.
Pierre Antuan Gilly Díaz.
Cristal Coyol Chantes.
María Hilda Carolina Cuatzo Chantes.
Jaime Coatl Mixcoa.
Víctor Tolama Flores.
Víctor Manuel Fernández de Lara Jiménez.
Fernando Zulbarán Alpízar.
Y Raymundo Cuautli Martínez.
Pero que nadie se espante.
Si lo ve por el lado amable, Arriaga ya hasta tiene gabinete.
Y todos felices y contentos.
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El regreso de Adolfo Karam era obligado.
Y sí, debo reconocer que me gana la amistad (digo, soy humano ¿no?), pero le aseguro que a partir de hoy Puebla está más segura.
Ahora sí, sin problemas, el general Mario Ayón puede seguir tranquilo en sus, digamos, tertulias.
Interminables tertulias.
Ya hay quien se ocupe.
Las ocasiones en que he podido platicar en corto con Mario Marín, de dos hombres me ha hablado maravillas.
Uno es precisamente Karam.
El otro, el doctor Ricardo Velázquez Cruz.
Por algo será.