Por la ponderación de factores locales y federales, el Instituto Nacional Electoral (INE) realizará la atracción, “asunción total” es el término específico, de las elecciones extraordinarias de la gubernatura y de los cinco municipios de Puebla en que se anularon los procesos. En un documento -del que este reportero tiene copia- los consejeros hacen esta petición formal y argumentada al secretario Ejecutivo, la que será aprobada en la sesión de Consejo General de este martes 5 de febrero. Con esta determinación, se busca garantizar un proceso “libre” y “auténtico” y una organización con “rigurosidad y especialización”.
En términos llanos, el INE y sus consejeros ven en Puebla todavía altos riesgos e insuficiencia del Organismo Público Local Electoral, por lo que toman el tema directa y totalmente en sus manos. El INE considera que el Organismo Público Local Electoral cuenta con todos los elementos técnicos y operativos necesarios, pero destaca que hay factores externos al propio IEE los que lo llevan a tomar la decisión.
La referencia constante en los argumentos que se presentan es la polarización, la falta de certeza, las dudas sobre la capacidad de las autoridades locales y el derecho de los poblanos a ya por fin tener un proceso de alto nivel de especialización.
La solicitud de “asunción total” es para el proceso a la gubernatura y las cinco municipales extraordinarios: Ahuazotepec, Cañada Morelos, Mazapiltepec de Juárez, Ocoyucan yTepeojuma.
Fue presentada el pasado 31 de enero y lleva la firma de los consejeros del INE titulares de las comisiones de Vinculación con los Organismos Públicos Locales, Marco Antonio Baños Martínez, y Temporal de Seguimiento de los Procesos Locales, Pamela San Martín Ríos y Valles.
Asimismo, de Dania Paola Ravel Cuevas y José Roberto Ruiz Saldaña, integrantes de las anteriores comisiones.
Se prevé, hay que subrayarlo, una contienda “que nuevamente se vislumbra como de alta competencia”.
En el apartado de antecedentes, el documento establece que, al darse esta elección extraordinaria (por la gubernatura) por la muerte de la gobernadora y no por la nulidad del proceso constitucional, se trata de un “contexto inusual”.
Por lo que “la organización de las elecciones extraordinarias que permitan a la ciudadanía de esa entidad, elegir a un nuevo o una nueva Gobernadora, ameritan el ejercicio de una atribución especial de este Instituto, establecida para ese fin en la reforma constitucional electoral de 2014”.
La narrativa pone énfasis en las circunstancias especiales que vivió Puebla en el pasado proceso:
“Cabe recordar que las elecciones pasadas estuvieron inmersas en un contexto de polarización social y tensión política, que involucraron a la ciudadanía y a los actores políticos, quienes impugnaron ante los órganos jurisdiccionales la declaratoria de validez, incluso originando el recuento total de votos, en busca de tener certeza de los resultados”.
Agrega sobre los procesos en ayuntamientos: “en las cinco elecciones municipales que fueron anuladas, se argumentaron vulneraciones al principio de certeza por violaciones sustanciales a la cadena de custodia de los paquetes electorales, así como por la no realización del escrutinio y cómputo de las casillas”.
Y al referirse a los seis procesos (gubernatura y cinco municipios) en general, señala:
“Es por esos motivos que es primordial generar las mejores condiciones de seguridad y certeza para el ejercicio del derecho a votar y ser votado, lo cual sólo puede ser garantizado a través de mecanismos de organización rigurosos y especializados”.
En el documento no hay ningún tipo de reproche ni se reprueba abiertamente la actuación del IEE de Puebla, es más ni siquiera una alusión directa.
Sigue el texto:
“Es determinante desarrollar acciones extraordinarias y emergentes para garantizar que la ciudadanía cuente a la brevedad con la celebración de elecciones libres y auténticas para elegir a sus representantes populares, conforme a los principios de certeza y legalidad en la entidad, pese a los reducidos plazos con los que se cuenta”.
Ese argumento, precisamente, es otro de los considerados, pues además de la organización y el desarrollo, se apunta que el plazo para la validez del proceso será mínimo.
Se prevé que el nuevo gobernador asuma el cargo antes de la primera quincena de agosto.
Y de ahí la importancia de la asunción total del INE.
“El INE cuenta con la capacidad técnica y operativa para garantizar las mejores condiciones para este proceso electoral extraordinario.
“La amplia experiencia con la que cuenta el INE, materializada en una estructura técnica y humana especializada y profesional, tanto en oficinas centrales como en los órganos desconcentrados del estado de Puebla, permite cumplir a cabalidad, bajo los mayores estándares de eficiencia y en estricto apego a los principios constitucionales electorales, los retos que representa la celebración de elecciones extraordinarias en dicha entidad federativa”.
Un tema que también analizará el Consejo General del Instituto este martes es la ratificación del Consejo Local del INE en Puebla.
Ese es tema aparte, pero la asunción total del caso poblano, da muchas luces.