Corren, presurosas, las apuestas en los pasillos de la Secretaría de Gobernación (Segob).
¿Quién, quién será el elegido del señor?
¿Quién asumirá el mando de la dependencia tras la salida de Julio Huerta Gómez para participar en el proceso interno de Morena para la candidatura a la gubernatura de Puebla?
¿El nuevo subsecretario de Desarrollo Político de la Segob, Ardelio Vargas Fosado?
¿O el subsecretario de Gobierno, Andrés Villegas Mendoza?
¿Quién?
¿AV o AV?
A raíz de la reciente llegada al gabinete de Ardelio Vargas, muchos analistas dan por hecho que él será el futuro titular de la poderosa secretaría a cargo de la política interior del estado.
Vargas Fosado fue secretario de Seguridad Pública con Rafael Moreno Valle y subsecretario de Gobernación con Miguel Barbosa Huerta.
Tiene, sin duda, la experiencia y la capacidad para encarar el cierre de la administración y, sobre todo, el 2024 electoral.
Hombre de diente largo y retorcido, que arrastra tempestades, encaja perfectamente en el perfil que necesita el gobierno de Sergio Salomón Céspedes Peregrina.
Sin embargo, no será así.
Todo apunta a que el sucesor de Julio Huerta en la dependencia será, en su momento, Andrés Villegas Mendoza.
¿Quién es Villegas Mendoza?
Aquí algunos datos que pueden ayudar a explicar su vertiginoso (y más que merecido) ascenso en la escalera del poder:
Originario de Tecamachalco, fue delegado de la Segob al inicio de la administración de Barbosa.
Fue el único delegado que, por sus resultados y fidelidad, sobrevivió a la limpia que al paso de los meses realizaría el entonces gobernador en las delegaciones de esa dependencia.
Desde entonces se ganó la confianza de Julio Huerta y se consolidó como uno de sus principales operadores políticos. Por entonces Huerta era subsecretario de Gobernación, pero en los hechos fungía como el verdadero secretario de Gobernación, pues Ana Lucía Hill Mayoral, la titular, cobraba, y se desempeñaba, como “florero”.
Andrés subió a coordinador de delegados de la Segob e incluso fue designado como presidente del Consejo Estatal de Morena, posición que conserva.
Sergio Salomón, Julio Huerta y Villegas Mendoza se convirtieron en los operadores más importantes de Barbosa Huerta. Sacaron adelante todos, todos los encargos. Resolvieron entuertos. Organizaron las marchas, los mítines, las consultas (por ejemplo, la de la revocación de mandato) y un largo etcétera que no cabe en esta columna pero que pasa por la recuperación del partido Morena para el barbosismo.
No fue casual que, tras la muerte de Barbosa Huerta, y ya como gobernador, los dos primeros nombramientos de Sergio Salomón hayan sido, primero, el de Julio Huerta, como secretario de Gobernación, y luego el de Andrés Villegas Mendoza, como subsecretario de Gobierno.
Hay una foto feliz de este último momento: es el 21 de diciembre de 2022. Aparece el gobernador Sergio Salomón entregando a Andrés su nombramiento. Falta poco, muy poco para la Navidad. Hay duelo, por supuesto, por el deceso de Barbosa. Pero las decisiones apremian. El COVID-19 arrecia de nuevo. Otra vez, amenaza. Y el cubrebocas se impone… A la derecha de Andrés, un orgulloso Julio Huerta. Es compadre de Andrés, hay gran cariño entre ambos, y es -en efecto- su mano derecha. Destaca la bandera de México. También la de Puebla. Desde un cuadro se asoma, testigo mudo de la escena, don Benito Juárez, el Benemérito de las Américas.
La cantada llegada de Andrés Villegas como secretario de Gobernación será un paso natural, un reconocimiento al trabajo y a la lealtad, pero sobre todo un mensaje, un poderoso mensaje hacia afuera y hacia adentro: por múltiples razones, el relevo de Julio Huerta no puede ser alguien ajeno al equipo de Julio Huerta.
Y en cualquier escenario: ya sea que Julio Huerta sea el candidato de Morena a la gubernatura, ya sea que funja como el coordinador en el estado de la campaña de la candidata o el candidato de Morena a la Presidencia de la República, ya sea que él vaya como candidato de Morena a algún otro cargo de elección popular…
Si la lógica política no falla, y en este caso en particular no tendría por qué hacerlo, Ardelio Vargas no podrá ser el nuevo secretario. Se va a quedar otra vez con las ganas. Sus tareas y sus guerras son, van a ser otras; si, eso sí, muy relevantes para el gobierno de Sergio Salomón, pero no al nivel de secretario.
El ascenso de Andrés Villegas será, también, la confirmación de que entre Sergio Salomón y Julio Huerta no hay ni ha habido ni habrá ruptura. Que son un mismo equipo y que caminan juntos… hasta donde tope. Los interesados en ponerlos a pelear, o en verlos divididos, tendrán que sentarse a esperar.
EN PUEBLA EL PAPÁ DE LOS POLLITOS
Para el jueves 29 de junio se anuncia la visita a Puebla del dueño del PRI, PAN y PRD y de ese bodrio denominado Frente Amplio por México: Claudio X. González.
El “Señor X” -literal- y padre de los pollitos -también literal- estará como orador invitado en la sesión de consejo de la Coparmex.
La mano que mece la cuna de sus empleados “Alito”, Marko y Zambrano viene para apantallar a muchos ilusos.
Ojalá que el empresario, el primer odiador del país del presidente Andrés Manuel López Obrador, aproveche para explicar tan bonito epic fail:
Este martes, el Consejo Electoral Ciudadano 2023, conformado por exconsejeros electorales y especialistas que asesorarían a la “oposición” para elegir a su candidato o a su candidata a la Presidencia, decidió disolverse porque, acusaron, el método presentado el lunes por los empleados del “Señor X” cambió frente al que ellos propusieron originalmente.
(Hasta aquí se escuchan las carcajadas en Palacio Nacional).