Garganta Profunda

Pues con la novedad de que el nombre de Enrique Agüera Ibáñez aparece en las listas elaboradas por el equipo de Andrés Manuel López Obrador como una posibilidad de candidato al Senado por las fuerzas de izquierda integradas al Movimiento de Renovación Nacional (MORENA).

Al lado de Manuel Bartlett Díaz, ex gobernador de Puebla; de José Juan Espinosa Torres, diputado local por Movimiento Ciudadano –antes Convergencia-, y del notario Horacio Hidalgo Mendoza, el rector de la BUAP se encuentra considerado dentro de los planes de AMLO, quien a través de su operador en el estado, José Agustín Ortiz Pinchetti, sabe de su fuerte posicionamiento.

Aunque en los últimos días ha crecido la posibilidad de que Agüera sea candidato al Senado pero por la virtual alianza PRI-PVEM-PANAL, en una fórmula que compartiría con el priísta Javier López Zavala, el alto funcionario universitario es bien visto por MORENA para lanzarlo como una de sus cartas fuertes para 2012, un escenario que no debe descartarse del todo, en especial si fracasan las negociaciones en curso, y que van más que avanzadas, con los enviados del CEN del PRI y la gente de Nueva Alianza.

Esta misma semana se sabrá quién será el candidato presidencial de la izquierda, si López Obrador o Marcelo Ebrard, y eso hará que la caza de perfiles ciudadanos como el de Agüera se incremente de forma importante, sobre todo ante la falta de cuadros propios con verdadero peso.

Respecto a las propuestas de MORENA para la Cámara de Diputados, las listas –de las cuales obtuvo una copia el reportero- incluyen de todo, como en botica.

Aparecen priístas, muchos del grupo de Enrique Doger –como Ignacio Mier, Israel Pacheco, Alejandro Oaxaca y Lauro Castillo-; porros y ex miembro del PRD –como Armando Méndez-; operadores zavalistas –como Rodolfo Herrera Charolet-; líderes de centrales obreras –como René Sánchez Juárez-; académicos –como Lilia Vélez Iglesias-; intelectuales –como Juan Carlos Canales-; ciudadanos sin partido –como el ex rector de la UDLAP Enrique Cárdenas Sánchez-; antorchistas –como Soraya Córdova Morán-; soldados de Manuel Bartlett –como Carlos Meza Viveros y Luis G. Benavides-; ex diputadas como Susana Wuotto y Rocío García Olmedo, y hasta el ex dirigente sindical del Colegio de Bachilleres, Refugio (“Cuco”) Rivas Corona, y el presidente del Instituto Político Empresarial del PRI, Alfredo Rivera Espinosa.

(El recientemente fallecido Rogelio Carvajal Lozano, ex líder de El Barzón en Puebla (Q.E.P.D.), estaba siendo considerado por el distrito 12 de Puebla).

Hete aquí la lista completa preliminar, con los más de 150 poblanos contemplados por MORENA para ser candidatos a San Lázaro:

DISTRITO 1-HUAUCHINANGO

Carlos Manuel Ignacio López

José Mario Jiménez Arroyo

Minerva Castillo Lafarja

Martiniano Esteban Santos Trinidad

Antonio Trinidad Morales

Vicente Pérez Gayoso

Eduardo Arturo Carreño Ortiz

Salvador Cravioto González

DISTRITO 2-ZACATLÁN

Alejandro Márquez Martínez

Jorge Luis Coriche Avilés

Miguel Andrés Santiago Rosario

Francisco Herrera Orea

Evelia Hernández Juárez

José J. Antonio Trujillo Martínez

DISTRITO 3-TEZIUTLÁN

Mercedes González Molina

Ernesto Lara Said

Concepción González Molina

Jesús Macip Ríos

Humberto Zárate López

Artemio Ruiz Antonio

Rodolfo Grajeda Gascón

DISTRITO 4-ZACAPOAXTLA

María del Rosario Uribe Molina

Ubaldo Jarillo Vázquez

Marco Alonso Aco Cortés

Eligio Fernández Lozada

José María Heraclio Sosa y Sosa

Juan Romano Santiago

Marco Antonio Alejo Calderón

DISTRITO 5-SAN MARTÍN TEXMELUCAN

Pablo Contreras Castillo

Rafael Ramírez Núñez

Tomás Arturo Tostado Velázquez

Miguel Ángel Sosa Ameneyro

Víctor Manuel Windfield López

Gustavo Berra Medrano

Carlos Morales Morales

DISTRITO 6-PUEBLA

Carlos Del Río Castelán

Mariana Mendívil Armenta

Mario Edmundo Chapital De la Rosa

Ulises David Medrano Salomón

Armando Méndez Romero

Ignacio Mier Velasco

Israel Pacheco Velázquez

Julio Glockner

DISTRITO 7-TEPEACA

Lauro Castillo Sánchez

Juan Sergio Salazar Vargas

Germán Valencia De la Cruz

Roberto González García

Rufino Morales Chávez

José Celso Romero Moreno

DISTRITO 8-CIUDAD SERDÁN

Ruth Huerta Morales

Rafael Herrera Vázquez

Arturo De Rosas Cuevas

Nazario Atanacio López Rojas

Karina Fernández Patricio

Amancio González Cano

DISTRITO 9-PUEBLA

Alfredo Rivera Espinosa

José Ramón Moreno Apango

Stephanie López Pineda

Eduardo Ochoa Jiménez

Édgar Rodríguez Cruz

Juan Carlos Canales

DISTRITO 10-CHOLULA

Ignacio Alvízar Linares

Raymundo Cuautli Martínez

Rodolfo Herrera Charolet

Rosalba Báez López

Luis Aguas Méndez

René Sánchez Juárez

Alejandro Oaxaca Martínez

DISTRITO 11-PUEBLA

Hugo Enrique Zárate Luna

Soraya Córdova Morán

Alejandro Tapia Cortés

Elsa María Bracamonte González

Manuel Báez Malpica

Lilia Vélez Iglesias

Enrique Cárdenas

DISTRITO 12-PUEBLA

Carlos Meza Viveros

Refugio Rivas Corona

Julián Germán Molina Carrillo

René Sánchez Galindo

Luis G. Benavides

Fernando Jara

Carmen María Palma Benítez

DISTRITO 13-ATLIXCO

María del Rocío García Olmedo

Eleazar Pérez Sánchez

Salvador Dávila Muñoz

Jorge González Duhart

Julio Gallardo D. Martini

José Luis Guyol Leblanc

DISTRITO 14-IZUCAR DE MATAMOROS

Anselmo Venegas Bustamante

Emmanuel Aquino Carrera

Melitón Lozano Pérez

Manuel Madero González

Adela Dolores Ambrosio Tapia

DISTRITO 15-TEHUACÁN

Álvaro Alatriste Hidalgo

Wilibaldo García de la Cadena Romero

Tino Arellano

Agustín Andrés Castro Balderas

Jesús Javier Aranda Castillo

DISTRITO 16-AJALPAN

Susana Wuotto Cruz

Liborio Juárez Temaxte

Gerónimo Efraín Solano Espinosa

Abimael Barragán Solís

Ignacio López Oropeza

Isaías Hernández Martínez

gar_pro@hotmail.com

Uno de los grandes pendientes del gobierno de Rafael Moreno Valle sigue siendo la esperada, urgente, necesarísima reforma al poder Judicial de Puebla, el cual sigue colocado como uno de los más corruptos e ineficientes de todo el país.

Lo más extraño es que a pesar de que aparentemente están dadas las condiciones para empujar una transformación total del sistema judicial local, a partir de la decisión de 13 de sus 25 magistrados de jubilarse, el cambio sigue sin llegar.

¿Qué fuertes e inconfesables intereses existen alrededor del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) que ni siquiera Moreno Valle, con todos los hilos del poder en sus manos, ha podido empezar la limpia de la cloaca?

¿O será que ya no hay interés por terminar con lo que todo mundo sabe: que en Puebla, la justicia tiene precio, como se demuestra casi todos los días gracias a las burdas y viles acciones de jueces y magistrados que se venden al mejor postor?

Hasta ayer seguían sin llegar al Congreso del estado las ternas que, se supone, deberían estar listas desde hace un mes para elegir a los sustitutos de Gerardo Manuel Villar Borja, Elba Rojas Bruschetta, Fernando García Rosas y Leonardo Tecua Petla, quienes ya disfrutan de su jubilación, con su jugoso, ofensivo salario mensual de 75 mil pesos.

De los magistrados que ya están instalados en su retiro de lujo, el único que ha sido relevado es Carlos Enrique Hernández Ramírez, por el melquiadista Jorge Ramón Morales Díaz, pero eso fue en julio pasado, y desde entonces ningún otro movimiento se ha dado.

¿Qué ha pasado?

Es todo un misterio, pero todo parece indicar que las resistencias al cambio al interior del poder Judicial son tantas y tan fuertes, que la anhelada, prometida transición está literalmente frenada.

La nomenclatura –una auténtica mafia- que manda en el TSJ, y que tiene en el presidente David López Muñoz a un mero títere de titiriteros mayores, ha impedido que nuevos y mejores perfiles lleguen a ocupar las vacantes, con el fin de superar el histórico rezago en calidad, autonomía, confianza y rapidez, como lo han acreditado año con año, desde al menos 2008, diversos estudios, especialmente el que conjuntamente efectúan la Asociación de Bancos de México (ABM), el ITAM, el Consejo Coordinador Financiero y Moody´s de México.

Hace poco trascendió que esa misma nomenclatura, que se sigue regodeando en la práctica del nepotismo (hijos, sobrinos, yernos, cónyuges y hasta compadres ocupan todo tipo de cargos en salas y juzgados) y que ha convertido en millonarios a la mayoría de sus integrantes, paró en seco la iniciativa del Ejecutivo para crear el Consejo de la Judicatura, instancia que regularizaría, revisaría y sancionaría el trabajo de los magistrados al modo de una contraloría interna.

El poder Judicial sigue siendo el peor y más corrupto poder del estado, y hasta el momento nadie ha logrado modificar esa triste, penosa realidad.

Ni el todopoderoso Moreno Valle, quien como candidato se comprometió a impulsar el cambio en el TSJ.

Hay que recordar que según el artículo 12 de la Ley Orgánica de poder Judicial, el gobernador del estado es el único que puede proponer al Congreso las ternas para el nombramiento de magistrados del TSJ.

¿Hasta cuándo?

No lo sé, pero Puebla ya no puede permitirse tener a magistrados que, a pesar de ser de los mejor pagados, significan una auténtica vergüenza nacional en aspectos torales para la salud de la justicia como la independencia, calidad, imparcialidad, rapidez, confiabilidad y honradez.

Sobre todo honradez.

¿Quieren pruebas?

gar_pro@hotmail.com

Quienes saben aseguran que, efectivamente, la que debería empezar a preocuparse por su futuro y en especial por la aprobación de su cuenta pública 2010, es la ex presidenta municipal de Puebla, Blanca Alcalá.

La priísta, aspirante al Senado de la República, no las trae todas consigo últimamente, y menos ahora que ya no es una especulación, sino un hecho, la animadversión –por decirlo con amabilidad- que le profesan desde Casa Puebla.

¿Qué hizo la actual delegada del CEN del PRI en Colima para causar tanto encono en su contra? ¿A quién ofendió? Como diría el Filósofo de Güemes: ¿Qué se comió que tanto molestó?

Quienes saben explican que Alcalá jugó con fuego en 2010, durante las campañas para renovar la gubernatura y la alcaldía poblana, y que no sólo terminó quedando mal con Dios y con el diablo, sino quemada, exhibida como una “traidora”.

Fueron por lo menos dos las reuniones secretas –una en Cuernavaca; la otra en el domicilio particular de Antonio Gali- que la entonces presidenta sostuvo con el entonces candidato de la coalición “Compromiso por Puebla”, Rafael Moreno Valle.

En ambas, sin dejar dudas, se comprometió a contribuir a la causa del hoy mandatario. Vamos: sumarse al frente antimarinista y, desde su trinchera, ayudarlo a conseguir su objetivo: sacar a Marín del poder y evitar que El Yunque pusiera un pie dentro de él.

La apuesta era: la derrota de Javier López Zavala y el triunfo de Mario Montero. Moreno Valle sería gobernador y Eduardo Rivera fracasaría en su intento por ser alcalde de Puebla. Así, todos los conjurados ganaban.

Pero titubear es una de las características que mejor definen la personalidad política de Alcalá. Y eso precisamente hizo en la recta final del proceso: dudó y al dudar, volvió al redil priísta, incumpliendo su palabra –otro de sus sellos- y desconociendo los importantes compromisos asumidos con Moreno Valle y su equipo, a quienes nunca más volvió a tomar las llamadas ni a devolver los mensajes.

Por eso, el fuerte adjetivo que le endosan los que hoy gobiernan es el de “traidora”. Y es tal la aversión, que incluso ya se ha hecho llegar al CEN del PRI, de forma clara, directa y contundente, una especie de veto a cualquier posibilidad de que la ex presidenta sea candidata a senadora. De hecho, aseguran, fue uno de los temas desahogados durante la última reunión con Humberto Moreira.

No sólo eso: su cuenta pública 2010 será objeto de una minuciosa, estricta revisión en busca de los hilos que, se sabe, llevan a terrenos harto fangosos, principalmente en obra pública y desarrollo social.

“Yo dejé todo en orden”, se ufanó hace un par de días la propia Blanca Alcalá. Pero tal vez sea bueno que fuera bajando sus expectativas. No vaya a ser que la realidad vaya a desmentirla otra vez, y con su severidad acostumbrada.

gar_pro@hotmail.com