Puntada de margarita
Martes, 30 de Junio de 2009Lesly Mellado May
Ni porque los líderes partidistas planearon terminar las campañas con escandalosas denuncias, este proceso electoral perderá su calificativo de gris, x…
Si no es porque la opinión publicada dio entrada a la discusión sobre el voto nulo, nada podría decirse de este proceso marcado por candidatos de bajo perfil, campañas encabezadas por figuras del deporte, y promesas sobre seguridad y canasta básica que poco tienen que ver con las tareas legislativas.
Y es que las discusiones de fondo como la necesidad de cambiar el sistema político, legislar sobre figuras como el referéndum y el plebiscito, quedan fuera de la agenda de los candidatos con el argumento de que a la gente no le importa.
Tal vez no le importa porque no lo entiende, como tampoco lo entienden algunos de los que andan en busca de una curul en San Lázaro.
Parece que este proceso no fue más que la continuación de una inercia, de una tradición caduca que debe cambiar.
Cada proceso electoral es una simulación. Simulamos que somos democráticos, que tenemos reglas claras, que gastamos menos, que no compramos ni vendemos votos, que ahora sí vamos a cambiar.
Si los pronósticos se cumplen y el voto nulo se convierte en la tercera fuerza electoral quedará explícito el mensaje a los partidos, algo que ya todos sabemos: el PRI no convence con su discurso de cambio; el PAN no supo conservar el voto antiPRI; el PRD no sabe sumar, ni restar, ni multiplicar, su único talento es dividir; los minipartidos deben desaparecer.