Ni una más, ni una menos
Lesly Mellado May
El feminicidio ya es la segunda causa de muerte entre las mexicanas de 15 a 34 años de edad, según el último reporte sobre defunciones publicado por el INEGI que analiza el primer semestre de 2022.
La dependencia federal contabilizó 402 mujeres asesinadas en el rango de 15 a 24 años, y 529, entre 25 y 34 años de edad.
En el caso de las niñas, el reporte indica que el feminicidio fue la quinta causa de muerte para las de 5 a 9 años; la sexta causa, para las de 10 a 14 años; y la octava para el rango de 1 a 4 años de edad. En total, 69 niñas fueron asesinadas en México de enero a junio de 2022.
El caso de los hombres no es diferente: el homicidio es la primera causa de muerte entre los de 15 a 44 años de edad.
Para Puebla, los asesinatos no figuran al menos en las cinco principales causas de muerte; sin embargo, es necesario insistir en que las autoridades deben cumplir con “cero tolerancia e impunidad” a los feminicidas.
En primera instancia no se puede combatir lo que no se conoce, y en Puebla tenemos danza de cifras respecto a los feminicidios del año pasado.
En el último informe del gobierno estatal, que va de enero a noviembre de 2022, se registraron 16 feminicidios. Por su parte, la Fiscalía General del Estado y el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), contabilizaron 19 casos. En tanto, el Observatorio de Violencia Social y de Género de la Universidad Iberoamericana cuantificó 54 posibles feminicidios.
El otro punto que urge combatir es la impunidad. Si bien durante el año pasado se dio celeridad a la investigación y aprehensión de los responsables de los asesinatos de la activista Cecilia Monzón, de la madre buscadora Esmeralda Gallardo, y de una niña de cuatro años en Chichiquila; no todas las familias de las víctimas han tenido acceso a la justicia.
El pasado 18 de enero, se realizó la primera sesión del Sistema Estatal para la Prevención, Atención y Erradicación de Violencia contra las Mujeres. Un acto meramente protocolario, donde el nuevo gobernador Sergio Salomón Céspedes pidió elaboración de informes, censos y planes que ya existen, y están publicados en el último informe de su antecesor; reiteró el exhorto a la FGE para que haga su trabajo; y pidió a los alcaldes (de municipios con alerta de género) que doten de presupuesto a los programas para mitigar la violencia contra las mujeres.
El Ejecutivo aseveró que ya no bastan las buenas intenciones, pero, al menos en esta primera reunión, no vimos acciones.