El viernes se estrenó en las salas de cine de Puebla el documental Presunto Culpable. Anunciada como “la película que todo México tiene que ver”, nos cuenta la historia de Antonio Zúñiga, un joven que siendo inocente fue sentenciado a 20 años de prisión acusado del asesinato de un tipo al que jamás conoció.

Nunca he pisado una cárcel, vaya ni siquiera he llegado a la esquina de la puerta, pero los aspectos del Reclusorio Oriente que se aprecian en la cinta, me provocan terror. Impresiona la escena en la que “Toño” cuenta que en su celda conviven 20 reos y que él debe dormir debajo de las literas, en el suelo, donde las cucarachas le acarician el rostro.

En su primer fin de semana el filme dirigido por Roberto Hernández y Goefrey Smith, recaudó 6.4 millones de pesos, con 128 mil espectadores. El documental mexicano más taquillero hasta ahora es “Fraude: México 2006”, que en 2007 recaudó 12 millones de pesos.

Además de la corrupción y el cinismo con el que actúan los encargados de la justicia en nuestro país, un aspecto que me impresionó fue el estado que guardan las penitenciarías de nuestra patria.  Lo que este documental ganador de premios en 12 festivales alrededor del mundo, nos invita a pensar es en la nula justicia y hasta humanidad que existe en el sistema penitenciario. En las 22 penitenciarías de Puebla, por ejemplo hay 3 mil 53 reclusos más de los permitidos en el país, lo cual se traduce en un hacinamiento de 58 por ciento en las cárceles de la entidad.

Lo anterior se desprende de un reporte presentado este lunes en La Jornada de Oriente, en el cual se da cuenta de que 30% de los reos no han sido sentenciados y el grueso está privado de su libertad por delitos del fuero común.

De acuerdo con el estudio “Indicadores sociales y de opinión 2010 La situación en las entidades federativas” elaborado por Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública de la Cámara de Diputados, Puebla figura como la sexta entidad con más población carcelaria permitida por la Secretaría de Seguridad Pública federal. El Distrito Federal aparece con una sobrepoblación de 21 mil internos, seguido del estado de México con 8 mil 500 y Baja California con cerca de 4 mil 800 reclusos.

Otra cifra reveladora indica que “de los 7 mil 372 internos por delitos relacionados con el fuero común, el 33.4 por ciento no han sido procesados; en tanto, el 66.6 por ciento cuenta con una sentencia firme por hechos como asalto a mano armada, fraude, asalto a casa habitación, robo de autopartes y de vehículos”.

Ahora bien, las cárceles de Puebla  obtuvieron una calificación promedio de 7.6 en la atención a los derechos humanos, que garantizan el desarrollo de actividades productivas y educativas, concretamente en el de programación de actividades diarias para los reos.