Debo confesar que yo soy fan de Pedro Ángel Palou García.  Alguna vez cubrí una graduación en la UDLAP, en tiempos en los que él acababa de ser nombrado rector. Fue entonces cuando me conquistó con el discurso que ofreció a los jóvenes. Después quedé prendida de “El Diván del Diablo”, un best seller que recomiendo para quienes gusten de lecturas llenas de suspenso, intriga y cuestiones de la psique.

Ahora en Facebook existe la aplicación “Charlas de café con Pedro Ángel Palou”. Resulta que si uno da clic en esta opción de la red social se despliega de manera aleatoria alguna frase del escritor poblano. Las hay de todo tipo, algunas son extractos de entrevistas que ha ofrecido al presentar alguna de sus novelas, otras formaron parte de las columnas o artículos periodísticos que ha redactado y también no podían faltar las extraídas de sus propias obras literarias.

Las hay con tintes políticos, filosóficos, sociológicos y hasta algunas cuyo incierto o burdo contenido causa extrañeza porque nada más no se entiende qué cosa quiso decir el ex secretario de Cultura del estado de Puebla. Aquí dejo algunas sentencias que la fortuna me arrojó:

“Escribir literatura implica formular ese desierto que grita implacablemente dentro de los cuerpos humanos, atrapar el nervio mismo del nihilismo”.

“El que come por memoria ya no saborea, hay que romperle todos los esquemas, dicen los modernizadores”.

“Falsas mentiras y falsas verdades: Que Santiago Creel es un clon o del gato de Chesthire, al que se le congeló la sonrisa”.

“Conozco a alguien, de cuya vida real ya dudo, pero cuya existencia virtual me convence: tiene ocho páginas, tres blogs, su nombre está en cinco redes sociales y me ha invitado a todas ellas. Cuando le pregunté, en la calle a dónde vivía me proporcionó su nuevo e-mail”.

“Se podría decir que los seres humanos padecemos síndrome de atención, es un mal cultural: encendemos el televisor y es un ruido de fondo, no lo escuchamos ni lo vemos en realidad”.

“(…)antes viajabas; ahora te viajan, te transportan como maleta. Eres un objeto, ocupas un asiento, es lo único que posees mientras te trasladas por los aires. Eres el 10F o el 49J (en CT, clase turbina)”.

“Zapata sólo quiere regresar a su campo, recostarse en los verdes prados y observar el paso de las nubes sobre su natal Anenecuilco”.

“El sentido común nos dice que la tradición, en algún momento, seguramente en el primero, fue invención”.

“Como un japonés aficionado o un nostálgico de You Tube he tomado una foto con mi celular, por si nadie me cree”.

“Claro que hay mucho descontento social, pero no existe un sólo espacio público en el que realmente pueda manifestarse”.