En 1997, Alejandro González emprendió un viaje en bicicleta para darle la vuelta al mundo. Había sido desahuciado con una enfermedad terminal y después de un ayuno de 25 días, ocurrió un milagro que lo curó de su mal y le permitió vivir más tiempo. Tras ese capítulo su perspectiva cambió y decidió salir a explorar el globo terráqueo como un tributo a Dios y a la vida.

Después de la travesía de 495 días en las que recorrió más de mil 300 ciudades, a bordo de su bicicleta y con 70 kilogramos en su equipaje, escribió un libro llamado “El mundo en dos ruedas”, mismo que ya inspiró la producción de una película que verá la luz el próximo año.

Sobre sus experiencias de vida, las complicaciones en el viaje, así como la extraordinaria lección que representó la aventura que le valió la nominación al Premio Nobel del Deporte, platicó este martes en Puebla, ante estudiantes de la Universidad Anáhuac, aquí el video de la conferencia editado por Martín Cristóbal, dale play:

Cada que puedo le pido a Carlos Slim en Twitter que me adopte y patrocine un viaje para darle la vuelta al mundo. Pero lo mío es mero sueño guajiro. Este hombre originario de Mexicali, Baja California sí que se movió, pues una vez en camino llamó la atención de importantes organizaciones que lo apoyaron con donativos, así como de marcas como Adidas o personajes multimillonarios como el mismísimo Bill Gates que aportó diez mil dólares.

Durante su paso por las capitales del mundo conoció a los Reyes de España, Michael Jordan, Bill Gates, Juan Pablo II, entre otros. Posteriormente, fue nombrado embajador de buena voluntad por parte de México. Después del viaje estuvo cuatro años en cama por una artrosis reumatoide.