“El Impostor” es la nueva obra literaria de Pedro Ángel Palou García. Fiel a su estilo, el escritor poblano se metió debajo de las piedras de la historia, en esta ocasión las que tienen que ver con el origen de la fe cristiana.
En 376 páginas editadas por cortesía de Planeta, el también ex rector de la UDLA, nos cuenta la verdad sobre Saulo de Tarso, hoy reconocido por los católicos como San Pablo. Palou describe que lejos de ser el fiel discípulo de Jesucristo, se trataba de un espía de los romanos, un judío que fingió convertirse al cristianismo pero que nunca dejó de servir al César.
Para presentar esta novela, el hijo de Pedro Ángel Palou Pérez, se sumergió siete años en toda la bibliografía de origen protestante, judía y católica en las que se hace referencia a este personaje.
El propio Palou García, compartió con alegría hace unos días en sus redes sociales que este nuevo libro valuado en 248 pesos se ubicó en el segundo lugar de ventas en piso en Librerias Gandhi, sólo por debajo de “Aura” del recién desaparecido Carlos Fuentes.
Siguiendo con la euforia de este relato que ya está levantando polémica, el también ex Secretario de Cultura del estado de Puebla estuvo este lunes en el chat en vivo de El Universal. Para conocer más detalles sobre la historia de este judío que tuvo que infiltrarse en una de las sectas que conspiraban en Palestina contra el Imperio Romano, dale play al siguiente video:
Hace ocho años leí La Silla del Águila, escrita por Carlos Fuentes, quien dejó este mundo en pleno Día del Maestro. La novela compuesta por cartas vio la luz pública en 202 pero narra la historia de una serie de peculiares personajes dentro de la esfera del poder en un escenario futurista, en específico en el año 2020.
“Hemos vivido con los ojos pelones, sin saber qué hacer con la democracia. De los aztecas al PRI, con esa pelota nunca hemos jugado aquí”, se lee en la contraportada de la célebre novela que hace unos meses saltó a la fama gracias a que Enrique Peña Nieto, erró el nombre del autor en plena Feria Internacional del Libro en Guadalajara.
A principios de 2004 yo estaba poco o casi nada empapada de la política y los enjuagues que se tejen alrededor de la ambición por el poder, así que el relato me dejo con el ojo cuadrado y contribuyó a que mi definición de democracia perdiera el halo de virginidad (o utopía) que tenía hasta entonces.
Cualquier parecido con los políticos que gobernaban México en ese entonces, no era mera coincidencia. La novela escrita por Carlos Fuentes, parece más bien un traje a la medida de nuestra República Mexicana donde habita una líder y operadora política como Elba Esther Gordillo, un sistema judicial que está al servicio de los intereses de unos cuantos y no de todo un país, un candidato pusilánime que sólo es el títere de quienes controlan la esfera económica y social, así como los viejos dinosaurios que sólo han mutado de piel pero que por dentro siguen manipulando.
Se están tardando quienes no han leído La Silla del Águila. Quienes ya lo hicimos, bien podríamos darle una releída en aras de encontrar un poco de luz ahora que el 1 de julio está cerca y la indecisión o apatía no está matando. En cualquiera de los dos casos, es lo menos que podemos hacer por Carlos Fuentes, un literato mexicano excepcional que se fue a los 83 años pero nos dejo un legado rico en cultura, sabiduría e historias que abren perspectivas.
A continuación el resumen del contenido de La Silla del Águila:
“El Presidente Lorenzo Terán, un hombre bueno pero abúlico. Su intrigante jefe de Gabinete, Tácito de la Canal. Su calculador secretario de Gobernación, Bernal Herrera. «Séneca», el consejero áulico que se sabe inútil. Mondragón von Bertrab, el severo secretario de la Defensa, portador de un terrible secreto. El jefe de la policía, Cícero Arruza, que no tiene enemigos porque los ha matado a todos.
El Anciano del Portal, dispensando sabiduría política desde los cafés de Veracruz, y el misterioso prisionero de la fortaleza de San Juan de Ulúa. El vengativo expresidente César León. Y dominándolo todo, María del Rosario Galván, operadora política y sexual suprema que un día le dice a su joven amante, Nicolás Valdivia: «Tú serás presidente de México”
Ahora bien, hace tres meses, Carlos Fuentes platicó largo y tendido con la periodista Carmen Aristégui sobre el panorama electoral y social en el fin de sexenio de Felipe Calderón y en la antesala de la elección presidencial de este año. Para verla, dale play:
Recuerdo que cuando era niña me reventé la película de Tom Sawyer como 20 veces, gracias a la programación de Televisa. Y las 20 veces me apanicaba la escena en que acompañado de su noble amigo Huckleberry Finn se escapan por la noche para ir a un cementerio en el que presencian un asesinato del temible Indio Joe.
El padre de esta novela publicada en 1876, Mark Twain hoy está en boca de todos pues en el marco de su 176 aniversario, Google lo ha traído al siglo XXI gracias a un doodle largo en el que los protagonistas de Las Aventuras de Tom Sawyer pintan la cerca, tal como en el libro ocurre por cortesía de la Tía Polly.
Mark Twain, seudónimo de Samuel Langhorne Clemens, escritor y periodista estadounidense, nació el 30 de noviembre de 1835, durante una de las visitas del cometa Halley. Curiosamente, predijo que también “se iría con él”. Y así fue, murió en medio de una profunda depresión en 1910, al día siguiente del regreso a la Tierra del cometa.
A continuación diez frases del llamado “Padre de la Literatura Norteamericana”, según William Faulkner:
1. Nadie se desembaraza de un hábito o de un vicio tirándolo de una vez por la ventana; hay que sacarlo por la escalera, peldaño a peldaño.
2. Un hombre con una idea nueva es un loco hasta que la idea triunfa.
3. Para Adán, el paraíso era donde estaba Eva.
4. Es mejor tener la boca cerrada y parecer estúpido que abrirla y disipar la duda.
5. El 28 de diciembre nos recuerda lo que somos durante los otros 364 días del año.
6. Di siempre la verdad, así no tendrás que recordar lo que has dicho.
7. Nunca permití que la escuela interfiriera en mi educación.
8. El hombre es el único animal que come sin tener hambre, bebe sin tener sed y habla sin tener nada que decir.
9. Aléjate de la gente que trata de empequeñecer tus ambiciones. La gente pequeña siempre hace eso, pero la gente realmente grande, te hace sentir que tú también puedes ser grande.
10. Dejar de fumar es fácil. Yo ya lo dejé como 100 veces.
Después de doce semanas en el primer lugar de ventas con su última novela publicada “Pobre Patria Mía”, Pedro Ángel Palou García, dejó la cascada de entrevistas que religiosamente venía haciendo para emprender un viaje hacia su nueva aventura literaria llamada “La verdad de las mentiras”.
Después de una semana de ausencia en la comunidad de Facebook, este martes el ex secretario de Cultural estatal reapareció ante sus 4 mil 991 amigos virtuales y publicó que se encontraba en Hanover. “Dedicado a imaginar los primeros años del cristianismo. Por ahora entre Roma, Capri y Palestina… Metido de lleno en la nueva novela: La verdad de las mentiras”, escribió en su muro a las 13:11 horas.
El respaldo de sus fans no se hizo esperar con la clásica aplicación “Me gusta” o incluso algún comentario alentador hacia el también ex rector de la UDLAP, quien deja el Porfiriato y la época de la Revolución Mexicana para adentrarse en una historia que promete estar empapada de aires mediterráneos, romanos, cristianos y evangelizadores.
Resultará interesante leer la versión del origen y evolución de la religión católica desde los ojos de este escritor de 44 años ya que según su perfil en Facebook su creencia religiosa es la budista zen.
Por lo pronto el éxito en las librerías donde ha vendido 35 mil ejemplares de la otra vida del dictador Porfirio Díaz, esa que pocos conocían y que lo pinta muy diferente a lo que retratan los libros de texto de la primaria; le ha valido también una decena de comentarios en su muro e incluso hay quienes han agregado elementos interesantes como la siguiente foto que compartió Arturo Alicia González en la que se ve al ex presidente de México en su paseo por las pirámides de Giza en Egipto, precisamente del otro lado del mundo, allá donde se encuentra Palou García.
Ajeno del teje y maneje de la sucesión electoral, lejos de la burocracia estatal y la academia, Pedro Ángel Palou García no se distrae y se encuentra dedicado a la promoción de un libro tras otro. Así es, el ex secretario de Cultura del gobierno estatal, mantiene una apretada agenda por los medios de comunicación nacionales e internacionales para dar a conocer su más reciente obra literaria “Pobre Patria Mía: la novela de Porfirio Díaz”, editada por Planeta.
El libro número 21 publicado por este poblano de 44 años presenta al dictador que, precisamente hace cien años encabezaba los festejos del Centenario de la Independencia de México.
A través de su muro en Facebook, el también ex rector de la UDLAP invitó a sus más de 5 mil amigos a acompañarlo en la presentación de “Pobre Patria Mía” el pasado sábado 12 de junio en el Anfiteatro del Centro Cultural Parque Interlomas. Sin embargo, después de ese día, la cascada de buenas nuevas no sólo se ha reflejado en la crítica en medios impresos y electrónicos que le han dado la vida a este relato de los últimos días del ex presidente de México.
Apenas dos días después de salir a la venta, el 14 de junio, este nuevo “hijo” de Palou se coló en el lugar 20 de los libros más vendidos de la librería Ghandi. En las 48 horas siguientes, el propio Palou anunciaba en su muro que la novela ya había escalado posiciones colocándose en el peldaño número ocho.
La historia que Pedro Ángel Palou nos ofrece el pasaje de la década en que se había comenzado la construcción del Ángel de la Independencia sobre la avenida Reforma. Cuestión que hoy resulta irónica toda vez que es precisamente, este personaje histórico quien menos se trae a colación en la fiesta más importante para los mexicanos, la noche del Grito de Dolores que se recuerda cada 15 de septiembre.
De acuerdo con las primeras críticas, en esta novela Palou demuestra que está convencido de que a Díaz no se le ha hecho justicia, y al gobierno tampoco le interesa reivindicar a uno de los villanos por excelencia de la historia de México. Es por ello que él le da la oportunidad al General oaxaqueño de recordar su patria con nostalgia y tristeza, desde el autoexilio, ya sin su personalidad ególatra y déspota, sino por el contrario, lleno de achaques y cansado en la recta final de su existencia.
“Estando en París, fui a su tumba de Montparnasse y me impactó. Es un pequeño mausoleíto lleno de cartas y de flores, como si fuera la Virgen de Guadalupe. Las flores se le cambian todos los días, y no su familia, sino gente que le visita. Es tan impresionante que cuando llegas al panteón y el sepulturero se da cuenta que eres mexicano te dice en francés: ‘Ah, viene usted a ver a su Presidente’”, comenta a manera de anécdota en cada entrevista Palou García.
Reportera. Adicta a las historias de vida, el cine, la música y las redes sociales. Orgullosamente universitaria de la Facultad de Ciencias de la Cominicación de la..