En el mundo de la música es común ser excéntrico y salir de lo convencional. Emilio de Gorgot en la revista JotDown nos comparte algunas de las carátulas de discos que han levantado revuelo en su época, ya que lo que espantaba a las generaciones de hace 40 años, hoy no causa cosquillas.

Aquí los tres casos más destacados:

THE JIMI HENDRIX EXPERIENCE

Quizá el caso más paradigmático de portada escandalosa es la del doble álbum Electric Ladyland, de The Jimi Hendrix Experience. La compañía de discos decidió que un harén de mujeres desnudas correspondía bien con la imagen que el público tenía de Hendrix gracias a sus letras repletas de cálidas referencias a las féminas, sus movimientos sexuales en escena y la apenas disimulada vocación del guitarrista de Seattle como mujeriego insaciable.

Lo más curioso de todo el asunto era que mucha gente creía que la portada de las chicas había sido idea del propio Hendrix y asumían que llenar la portada de “foxy ladys” parecía muy propio de él… sin embargo, el guitarrista la consideraba una provocación vulgar y nunca le gustó; de hecho, la discográfica había utilizado la foto de las mujeres en contra de su opinión.

LOS BEATLES

Los Beatles —o parte de ellos— sí se sintieron más cómodos al utilizar una de sus fotografías más chocantes para ilustrar el recopilatorio Yesterday and today. En la imagen aparecían disfrazados de médicos, manchados de sangre, rodeados de casquería y muñecos despedazados que simulaban ser niños muertos. El truculento montaje, que había sido idea del fotógrafo de una de sus sesiones, divirtió a los cuatro músicos hartos de las típicas fotos promocionales “happy” e inocentes que el público asociaba con ellos.

JOHN LENNON

En un alarde de ¿modernidad? ¿expresividad?, o Dios sabe qué, John Lennon tuvo los santos redaños de publicar un disco en cuya portada aparecían completamente desnudos él y su novia Yoko Ono.

Parece que ni el Chapulín Colorado atendió la suplica de la ex Nuestra Belleza Puebla, María Vanesa Polo Cajica, quien escribió “Y ahora quién podra salvarme?” en su cuenta en Twitter. Y es que ahora que la busca la Procuraduría Federal de Justicia del Distrito Federal y todas las corporaciones aliadas como la PGJ del estado de Puebla, la chica de 26 años se ha esfumado de la faz de la tierra, pues incluso ha desaparecido su cuenta en Facebook que hasta ayer se mantenía abierta y mostraba galerías de fotos de la joven poblana.

La otra Lady de Polanco está ahora en el ojo del huracán una vez que su comadre ex Big Brother, La Negra, mejor conocida como Azalia, salió a dar la cara, ofreció una disculpa con la cola entre las patas y pagó sus mil 796 pesitos por haberle gritoneado y empujado a un par de policías que “sólo hacían su trabajo”. Y es que como están las cosas en el país, lejos de ser una ofensa, la palabra asalariado debiera considerarse como un halago en los tiempos del desempleo.

Ahora bien, de la “Señorita Puebla 2004” sabemos que tiene 26 años y se definía a ella misma como “actriz y modelo de profesión nacionalista por convicción y amante del cine en toda la extecion (sic). Ganadora de Nuestra Belleza Puebla 2004″. A raíz del escándalo las críticas que le han llovido reflejan un rechazo de parte de sus paisanos que, quizá, tampoco le perdonan que no haya resultado nominada entre las 10 más bellas como parte de la semifinal de Nuestra Belleza México en la edición que le tocó llevar el nombre de su entidad.

“Ojalá la señorita nunca regrese a Puebla”, es uno de los cientos de comentarios en la red que critican a la joven que abandonó sus estudios en la Universidad de las Américas Puebla, para irse a vivir a la ciudad de México en busca de fama y fortuna.

Desde el 26 de agosto existe en You Tube una caricatura alusiva al zafarrancho de las Ladies de Polanco que ya se ha reproducido casi 3 mil 700 ocasiones. Para verlo dale play: