Ahora que anda muy de moda la “productividad”, resulta que también los lenones están poniendo a trabajar a “marchas forzadas” tanto a las sexoservidoras que tienen bajo su dominio como a las menores de edad que mantienen recluidas para ser explotadas sexualmente.

De acuerdo con una denuncia de las trabajadoras sexuales que laboran en los hoteles de Puebla, hecha a la Agencia de Noticias Independiente, tanto hoteleros como encargados “les exigen laborar desde que abren el hotel hasta su cierre y si no completan ocho ratos en una jornada de trabajo, deben entregarle al encargado del mismo, el equivalente al pago de dos cuartos. Cada cuarto cuesta entre 50 y 100 pesos el rato.”.

La nota publicada este viernes por Elvira Madrid Romero, revela otro par de anomalías en un negocio que por años ha operado ante la vista de las autoridades y la supuestamente “espantada” sociedad poblana. Entre otras irregularidades, las trabajadoras sexuales acusaron que los encargados venden los condones que en teoría la Secretaría de Salud debería repartir de manera gratuita para evitar la propagación del VIH y otras enfermedades de transmisión sexual. De tal manera que en los hoteles de paso estos preservativos se compran en cuatro piezas por diez pesos.

Según el reporte, cada una de las 30 casas de citas que operan (sea hotel, vecindad o casona) paga al ayuntamiento de Puebla 5 mil pesos al mes, a la Secretaría de Salud 3 mil pesos y a la Procuraduría General de Justicia, 2 mil pesos. De tal manera que si usamos el ábaco cada casa destina 10 mil pesos a la serie de “permisos” y en suma estarían repartiendo a funcionarios públicos 300 mil pesos al mes.

Algunas ubicaciones proporcionadas en el reporte son la calle 12 poniente #100, la 10 poniente a la altura del “Parque del Señor de los Trabajos”, y la 7 norte entre 8 y 10 poniente, así como el callejón Variedades ubicado entre 2 y 4 poniente, todos ubicados en pleno centro histórico de Puebla.

…continuará