Natalia Asveenko es una mujer rusa de 36 años que se atrevió a zambullirse desnuda en las heladas aguas del Mar Blanco, ubicadas en la región rusa de Murmansk, cerca del Círculo Polar Ártico.

Después de su rutina de yoga y meditación, se sumergió mar adentro para tener un encuentro cercano con belugas, una especie de cetáceo de la familia de los delfines.

Cabe mencionar que esta intrépida fémina no se metió así como así a la profundidad de las aguas, pues Asveenko es campeona mundial de apnea, como se conoce a la suspensión de la respiración dentro del agua, a la que también se le llama buceo libre o a pulmón.

“La idea era ampliar nuestros límites, redefinirlos. Quería nadar bajo el hielo del círculo polar”, contó ella misma a BBC Mundo y reveló que el objetivo de su odisea era filmar un video sobre el buceo libre y comprobar la teoría de que las belugas y los delfines tienen una especie de radar que registra las ondas de los humanos bajo el agua y ver cómo esto afecta su comportamiento.

Que por qué lo hizo luciendo su traje de Eva, ella misma explica que la idea era estar en la misma condición que las belugas, es decir, hacerse amiga de ellas.

Para vivir la experiencia pura, los científicos que la acompañaron le pidieron que probara tres variantes. Primero se metió con traje de neopreno y luego con bikini. “Cuando me metí con traje las belugas se sentían cómodas, jugaban conmigo. Y en bikini me sentí más cómoda que sin ropa, menos vulnerable”, dijo después de pasar 12 inolvidables minutos con estos animales.