Que no te den la espalda
Jueves, Junio 19th, 2014A través del Proyecto AliMente, las poblanas Beatriz Marina Pineda y Yatziri Zepeda, ambas egresadas de la UDLAP, forman parte de una ingeniosa campaña social llamada “Que no te den la espalda si quieres darle pecho”, como una respuesta a la que lanzó en mayo el gobierno del Distrito Federal bajo el eslogan: “No le des la espalda, dale pecho”.
Después de que los cuerpos de actrices como Maribel Guardia, Cecilia Galiano, Camila Sodi y la “Barbie” Juárez, fueron ocupados en una propuesta llena de clichés, un grupo de mujeres decidió realizar su propia campaña retratando a 15 mujeres comunes y corrientes para promover la lactancia materna.
Si bien, las poblanas agradecen la iniciativa del gobierno de la ciudad de México por voltear los ojos a un tema tan importante y poco considerado como es la alimentación de los bebés, consideraron que el mensaje se enfocó en la belleza comercial, dejando así de lado otro tipo de cuerpos más cercanos a la realidad de mujeres que han dado vida.
“Nuestra campaña muestra a mujeres igualmente hermosas que están interesadas en promover la lactancia natural, con las que más mexicanas podrían sentirse identificadas” se lee en el sitio oficial de la organización civil http://quenotedenlaespalda.org
Otro de los argumentos que ofrecen son las cifras de la Encuesta Nacional de Salud, que indica que las principales razones por la que las mujeres mexicanas no amamantan en la actualidad es porque “no tienen leche” (34%), “estaban enfermas” (13.7%) y porque “el bebé no quiso” (11.4%). Dado que la Organización Mundial de la Salud (OMS) afirma que sólo el 2% de las madres y bebés no podrán amamantar por causas biológicas. Esto muestra la falta de información y acompañamiento que se les ofrece a las mujeres mexicanas.
“Las madres que deciden amamantar se enfrentan a numerosos obstáculos, lo que resulta en bajísimas tasas de lactancia en México. Esto se debe, en general, a la escalofriante tasa de cesáreas, a una pobre capacitación en la materia de la mayoría del personal de salud, a la falta de acompañamiento adecuado de las madres, a la violación de códigos internacionales para la venta de fórmula láctea y a la poca vigilancia de conflictos de interés en las prácticas de la industria de alimentos. Como resultado de esto, son comunes las prácticas hospitalarias y pediátricas de separar al bebé de su madre y de recomendar fórmula para los recién nacidos y para los bebés que han pasado los 6 meses. Sumado a esto, existen inadecuadas condiciones laborales para que las mujeres trabajadoras puedan amamantar o extraerse leche, así como un rechazo social hacia el acto de amamantar”.