Veía la página de la campaña para la relección presidencial de Hugo Chávez y me recordó a la fallida república amorosa que proclama AMLOVE, es decir Andrés Manuel López Obrador. Y es que también tiene un corazón por símbolo en el que se enmarca la bandera de Venezuela y en su discurso se hacía alusión a que quienes iban con su proyecto de patria iban por el amor.

En fin, con eso de que cada país tiene el gobierno que se merece pues respetemos a los venezolanos que, aseguran - o al menos así lo hicieron saber en las boletas el 54.4 por ciento de los votantes que acudieron ayer a la jornada electoral que se vivió en Venezuela – que les gusta cómo ha conducido esa patria desde 1999, cuando se convirtió en el presidente más joven de esa nación.

A sus 58 años, en 2011 fue intervenido por un tumor cancerígeno, del cual asegura que se ha recuperado del todo, así que Hugo Rafael Chávez Frías (nacido el 28 de julio de 1954 en Sabaneta, Barinas) será el Presidente de la República Bolivariana de Venezuela hasta 2016 si es que el Dios en el que cree (porque es un devoto católico) no dispone otra cosa, recordemos el caso de Alonso Lujambio que estaba muy apuntado para ser el candidato presidencial del PAN en México y el cáncer no sólo se lo impidió sino que lo fulminó hace un par de semanas .

Independientemente de su perfil dictatorial, Chávez es todo un personaje que como La Chimoltrufia como dice una cosa dice otra pues no tiene pelos en la lengua, aquí algunas de sus frases célebres:

• Cuba es el mar de la felicidad. Hacia allá va Venezuela.

• Váyanse al carajo yanquis de mierda, que aquí hay un pueblo digno.

• El Rey es tan Jefe de Estado como soy yo. Sólo que yo he sido electo tres veces con 63 por ciento. Somos iguales, Jefes de Estado igual. Somos tan Jefes de Estado el indio Evo Morales como el rey Juan Carlos de Borbón y yo.

• Señor presidente de México, si usted quiere que lo respeten, respete. ¿Escuchó? Luego no vayan a decir que soy yo el que atropello, que Chávez es el peleón del barrio.

• No sea pendejo, Dr. Insulza [...] Vaya que es bien pendejo el doctor Insulza. Un verdadero pendejo, desde la P hasta la O [...] No le tenemos miedo. Usted está muy equivocado [...] Vaya con sus insulserías a otro lado.

• Por Cristo, el más grande socialista de la historia, por todos los dolores, por todos los amores, por todas las esperanzas, que haré cumplir con los mandatos supremos de esta maravillosa Constitución, aún a costa de mi propia vida. Patria, socialismo o muerte.

• Ayer estuvo el diablo aquí, en este mismo lugar. ¡Huele a azufre todavía esta mesa donde me ha tocado hablar! Ayer, señoras, señores, desde esta misma tribuna el señor Presidente de los Estados Unidos, a quien yo llamo «el diablo», vino aquí hablando como dueño del mundo, como dueño del mundo. Un psiquiatra no estaría demás para analizar el discurso de ayer del Presidente de los Estados Unidos.

• El mundo debe olvidarse del petróleo barato… Seguirá subiendo y llegará algún día a los 100 dólares por barril.

• Creo que estamos sufriendo de impotencia política. Necesitamos un viagra político.