Un viejo veracruzano, adoptado en Puebla, llegará hasta Francia y su visión será vista por toda Europa. Sucederá en la edición número 66 del Festival Cannes, uno de los más importantes sobre la tierra en materia de cinematografía.

“El viejo” es una producción realizada en Puebla, por el estudiante veracruzano Alberto Ordaz Vera, egresado de la Licenciatura en Psicología de la Universidad Autónoma de Puebla (UAP) y de criminología, criminalística y técnicas periciales del Colegio Libre de Estudios Universitarios (CLEU).

La producción seleccionada por Cannes, fue realizada con apoyo del Centro de Formación Audiovisual F65, con una inversión cercana a los ocho mil pesos. Y por increíble que parezca, la agrupación de cinematográficos francés es la única que le abrió la puerta al veracruzano, adoptado en Puebla.

Ni la Cumbre Tajín ni el Festival de Cine de Puebla (FIC) les abrieron temporada de exposición. En Puebla sólo existió una exhibición especial en el Teatro de la Ciudad “por no dejar”.

La proyección de “El Viejo” dentro de la sección Short Film Court en Cannes está programada para los días 17, 18 y 19 de mayo. Alberto Ordaz Vera viajará este mismo lunes a Francia para mostrar su obra y regresará a México, una vez concluido Cannes.

En el siguiente clip se puede apreciar una breve reseña de cortometrajes poblanos, incluidos en la Red de Cineclubes de Puebla, donde aparecen imágenes de “El viejo”, de Ordaz Vera.

¡A toda madre!, los mexicanos son ingeniosos al momento de nombrar a su progenitora. A lo largo de la historia se han inventado varias frases que denotan desde disgusto, alegría, sinceridad y hasta ofensas al prójimo.

Lo cierto es que las mamacitas son lo más preciado que tiene el mexicano y con motivo de este 10 de Mayo, les presentamos las expresiones mexicanas más utilizadas,  en las que se recuerda a las mamás:

1.- Chinga tu madre

2.- A toda madre

3.- Madres

4.- Que poca madre

5.- De a madres

6.- Con madre

7.- Y tu mamá también

8.- Me saludas a la tuya

De acuerdo al Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), en el país residen 40.8 millones de mujeres de 15 años y más; entre las cuales siete de cada diez – es decir el 71.6 por ciento ha tenido al menos un hijo.

Se estima que 8.2 millones de mujeres de 12 años en adelante y que tienen por lo menos un hijo son viudas, separadas o divorciadas.

Las mujeres que tienen a su primer hijo entre los 15 y 19 años, son más propensas a actos de violencia por parte de su última pareja, por lo menos el 49 por ciento de ellas.

Las madres solteras tienen una colaboración activa en la vida económica del país con más del 72 por ciento de participación; esto en 2011.

Finalmente, detalló que la tasa global de fecundidad señala que las mujeres tienen en promedio 2.3 hijos durante su periodo fértil.

Hay un viejito, de 89 años de edad, que ha recorrido toda la ciudad. Todo el estado. Todo el país. Ha caminado por más de 54 ciudades importantes en la República Mexicana, siempre con una sola intención: que los mexicanos dejen de tirar basura.

Cuando está en Puebla, Don Tomás Ortiz González sale todos los días con una grande pancarta, de color amarillo y letras negras, que invitan a la gente a no tirar basura, a dejar un México limpio y a enseñarle a un niño estas costumbres.

Con su gorrita blanca se ha colocado en la esquina de la 25 poniente y el bulevar 5 de Mayo, recorre el Centro Histórico, la avenida de la Juárez, la zona del Parque Ecológico. Incluso, ha aprovechado foros, conferencias y hasta informes de labores de funcionarios y diputados para exhibir su pancarta.

La historia de “el viejo trotamundos”, como se autonombra, inició cuando tenía 18 años y formaba parte del cuarta batallón de infantería de la XXV zona militar de Puebla. Más tarde, cuando tuvo a sus hijos, se dedicó a pregonar, primero en su colonia y más tarde en su estado, que México debe estar limpio empezando desde casa.

Es quizás el niño eterno. Ha pasado a la historia por generaciones. Nuestros abuelos lo conocieron cuando eran pequeños. Ahora lo sintonizan, cada domingo, el mismo canal para volverlo a ver, junto a sus nietos. Aunque el tiempo no se detiene.

Xavier López “Chabelo” cumplió 78 años de edad hace unos días y los celebró trabajando. Igual que hace 58 años: En un foro de televisión, grabando un programa con pantaloncillos cortos, un babero, unos mocasines y la tradicional catafixia.

¡Es inmortal!, aseguran en las redes sociales, a pesar de que cada año –por lo menos desde hace un lustro – muere falsa e incidentalmente por lo menos dos o tres veces. Todas las versiones son ilusorias, pues al domingo siguiente: ¡Resucitó!, pregonan.

Pocos saben que Chabelo es originario de Chicago, en Estados Unidos. Ahí creció. Más tarde se fue a vivir, junto a sus padres, a León, Guanajuato, y más adelante, al Distrito Federal, donde encontró a su personaje.

Xavier López Rodríguez recibió en diciembre de 2012 dos Record Guinness: el primero por ser el animador más antiguo, con 44 años en el programa En Familia con Chabelo; el segundo, por representar el mismo personaje durante 57 años. Y cada domingo acumula más.

Aquí algunas de las imágenes más originales sobre la longevidad de Chabelo, el amigo de todos los niños.

El fenómeno de la migración internacional es cada día más visible. Con ello, el clima de inseguridad para las decenas de centroamericanos y mexicanos que buscan llegar al otro lado. Tíos, padres, abuelos, suegros, sobrinos y hermanos se marchan para buscar una mejor vida, con la poca seguridad de llegar sanos y salvos a sus destinos.

En medio de la nube de violencia y de violaciones contra los migrantes, Las Patronas, un grupo de mujeres que desde hace casi 18 años presta ayuda humanitaria y proporciona hospedaje y comida a los migrantes que pasan por Veracruz, recibió esta semana el premio de derechos humanos “Sergio Mendes Arceo”.

Detrás de este reconocimiento está una larga lista de quehaceres, como cocinar todos los días, apartar un poco de la propia comida para la ayuda a migrantes, procurar mantener una guardia de apoyo, donar arroz, frijol y lo que se pueda, para alimentar a los centroamericanos que viajan sobre “La Bestia”.

La tarea de Las Patronas está centrada en dar alimento a los migrantes. Después de cocinar, embolsan toda la comida que tengan a su disposición. La juntan en cubetas y bolsas más grandes y se aproximan al tren. Esperan que pase la locomotora, cargada de personas, para aventarles el sustento. También embotellan agua. Los migrantes son muchos, el alimento y el tiempo que tienen para depositarlo en el tren, muy poco.

Cuando Las Patronas recibieron el reconocimiento en manos del poeta y escritor Javier Sicilia, una de ellas de nombre Julia expresó: “De momento te sientes muy contenta, tantas cosas que hacemos por el migrante, que te den un premio es una emoción que a veces no nos los esperamos”.

Aquí el video en reconocimiento a esta labor. Donde un grupo de mujeres buscar que se respeten los derechos humanos de cientos de migrantes que pasan por México, únicamente para mejorar su condición de vida. Para verlo dale click.