Los últimos siete años me la he pasando lidiando con el sube y baja de la grasa en mi cuerpo. Cuando me doy cuenta que ya me excedí en tacos, hamburguesas, pizzas y refrescos, he recurrido a severos métodos como la mesoterapia, la ozonoterapia, las pastillas naturistas, la acupuntura china, la auriculoterapia con balines y hasta la hidrolipoclasia. Si bien algunos han dado resultados muy favorables, otros terminaron por frustrarme y obligarme a consolarme con una caja de chocolates o algún antojito cero nutritivo.
Hoy por vez primera decidí dejarme de cuentos chinos y acudir con una especialista en la materia, total que no estoy obesa tipo Récord Guinness y lo que me importa, de verdad, es aprender a comer de tal manera que pueda disfrutar de todo sin remordimiento y sin que el grgrgr de los principios de gastritis por el desorden alimenticio y la inflamación por la colitis nerviosa sigan empañando mi escultural figura.
Desde hace dos semanas decidí seguir los consejos de una nutriologa, quien no me dijo nada que mi madre no me haya recitado antes: come a tus horas, haz ejercicio y toma agua. Así que esta vez dejaré la necedad y optaré por la vía natural, sana y deportiva. Ya les contaré cómo me va después de que la doctora me dijo que “como digieres los alimentos es como digieres la vida”.
El hecho de que México ocupe el primer lugar en obesidad infantil es ya un dato que nos preocupa a las futuras madres de familia y a Consulta Mitofsky, quien se lanzó a preguntarle a mil mexicanos algunos detalles sobre sus hábitos alimenticios y esto fue lo que encontró:
• Hay quien dice que el desayuno es el alimento más importante del día y parece que esa opinión prevalece entre los mexicanos, 38% opina que el alimento matutino es el más importante, 24% dice que es la comida y sólo 2% que es la cena.
• Comer a la mitad del día es con mucho la que más recurrentemente se realiza fuera del hogar, en el país casi 3 de cada 10 personas dicen que la realizan en un lugar distinto a su casa, situación que alcanza el 15% para el desayuno y 14% para la cena. A mayor edad y a menos escolaridad e ingreso, más se alimentan los ciudadanos dentro de su hogar
• Cuando un mexicano tiene que comer fuera de casa, su primer pensamiento parece ser alimentarse de tacos (32%), de tortas (19%), de comida corrida (10%) o de fruta (10%).
• Los mexicanos dedican 85 minutos para alimentarse, poco tiempo si se considera que son 3 alimentos los necesarios. Mientras 17% dice dedicarles menos de 30 minutos otro parecido 16% dice dedicar más de 2 horas.
• El sabor y el aroma son los que más toma el ciudadano en cuenta en los alimentos que consume; el contenido nutricional sólo supera al precio pero está por debajo de otras características como el aspecto, variedad o cantidad de alimentos.
• Para el ciudadano, la comida chatarra está caracterizada por frituras como papas fritas ya que espontáneamente fue respuesta del 49%, muy por arriba de 16% que mencionó los refrescos, 13% las fritangas como quesadillas y sopes, y 11% de cualquier comida callejera.
• En una semana normal, el mexicano consume en 5.6 días en promedio agua natural; 3.8 días refrescos; 3.6 verduras; 3.3 cereales y 3.1 días jugos.