El general Glen VanHerck, jefe del Comando Norte de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos, aseguró que Rusia tiene en México al grupo más grande de espías desplegados en el mundo para obtener información estadunidense.

En una audiencia ante el Comité de las Fuerzas Armadas del Senado, el jefe del Comando Norte fue cuestionado por el senador republicano por Dakota del Sur, Mike Rounds, sobre la situación en el hemisferio respecto a los grupos extremistas y del crimen organizado.

VanHerck respondió a la pregunta del legislador señalando que los grupos extremistas y organizaciones transnacionales del crimen organizado crean inestabilidad gubernamental en la región que le favorece a dos naciones, China y Rusia, que buscan acceso e influencia.

“Hay actores que están actuando de manera agresiva en todo el sector, incluyendo a Bahamas y México”, comenzó explicando en la audiencia el general VanHerck a los miembros del Comité de las Fuerzas Armadas del Senado federal estadunidense.

“Debo señalar que la porción más grande de miembros de la GRU en el mundo -la agencia militar ultra secreta rusa- en estos momentos está en México, son personal de inteligencia de Rusia y se mantienen vigilando muy de cerca para aprovechar las oportunidades e influir con miras en Estados Unidos”, sostuvo el jefe del Comando Norte.

Tras la respuesta del general VanHerck, el senador republicano de Dakota del Sur cuestionó a la general Laura Richardson, jefa del Comando Sur, si estaba de acuerdo con lo dicho por su colega y la respuesta que obtuvo el legislador fue un rotundo “sí”.

Tanto el jefe del Comando Norte como la jefa del Comando Sur no ampliaron más sus respuestas a los cuestionamientos de Rounds y ningún otro de los senadores dio seguimiento al asunto en la audiencia.

La GRU es parte de las fuerzas armadas de la Federación Rusa y junto a los agentes de la KGB son la contraparte a la Agencia Nacional de Inteligencia (NIA), a la Agencia de Inteligencia de Defensa (DIA) y a la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos.

Bajo las órdenes del presidente ruso, Vladimir Putin, los agentes de la GRU se encargan de infiltrar a los gobiernos extranjeros, en especial a los que mantienen muy buena relación con Estados Unidos y que colindan frontera con ese país, como es el caso de México.

En su testimonio ante el Comité senatorial y al hablar de las organizaciones criminales transnacionales, el jefe del Comando Norte resaltó la cooperación que recibe el Pentágono por parte del Secretaría de la Defensa Nacional y la de Marina de México.

“Son firmes como aliados en seguridad y siguen siendo un baluarte para contener la presencia en Centro y Sudamérica de las organizaciones criminales transnacionales”, sostuvo el general y jefe del Comando Norte de las fuerzas armadas estadunidenses.

Por su parte, la general Richardson indicó que el tráfico de drogas procedente de Sudamérica sigue siendo uno de los grandes retos de la región, y que las rutas centroamericanas son las de preferencia de los criminales para meter narcóticos a México y luego a Estados Unidos.

Fuente: Proceso